Sorpresa por la aparición de supuestas marcas para robar

La sensación de los vecinos de Ermita Nueva oscila entre la sorpresa y la preocupación, después de que, en los últimos días, hayan aparecido extraños símbolos, similares a los utilizados por algunas bandas de ladrones para marcar y describir sus objetivos. Las señales aparecieron en varias viviendas y en un lateral del colegio.

La propietaria de una de las casas afectadas, situada en la calle Centro, indicó a Diario JAÉN que en su caso las marcas se hicieron a plena luz del día y que un residente en el entorno vio cómo lo hacía “un hombre alto, delgado y con mala pinta”. Añade que las pintadas se realizaron en otros casos de noche. La ermiteña, que prefiere quedar en el anonimato, detalla que las Fuerzas de Seguridad les han confirmado que puede tratarse de códigos de delincuentes.

Otra de las propietarias, Custodia Cano, precisa que en la mayoría de los casos, los vecinos han optado por borrar las señales. No obstante, ella las fotografió antes de dirigirse a la Guardia Civil. Destaca que eran muy difíciles de borrar. Otro habitante de la aldea, Ismael Benavente, sospecha que los símbolos se hicieron con un esprái.

Las marcas en cuestión consisten, principalmente, en círculos, puntos y rombos de color rojo o naranja, de tamaño mediano o grande, y muy visibles. También se representaron números, en concreto el 14 y el 29. Las figuras aparecen tanto en inmuebles habitados como en otros vacíos. Sin embargo, hay algunos elementos que hacen pensar a parte de los ermiteños que se trata de una “broma”. En concreto, lo llamativos y visibles que son los signos y su presencia en la fachada de un lavadero, en el bordillo de una acera e incluso en la calzada de la calle.

El pedáneo, Antonio López, resta importancia a la situación. Admite que ha habido ya denuncias y que los agentes han visitado las viviendas para analizar las marcas. “Lo que quiero es que lo cojan, a ver quién ha hecho eso”, manifiesta el representante vecinal. Destaca que las Fuerzas de Seguridad trabajan en el asunto y muestra su tranquilidad. “Estamos preparados, organizados y sobre aviso. Hay un grupo de WhatsApp en el que está casi toda la aldea”, afirma. Al respecto apunta que sus convecinos, si ven cualquier movimiento extraño, anotaran matrículas y tomarán fotografías.

Varios domicilios de Ermita Nueva han sido objeto de robos en los últimos años y, por esta causa, se ha incrementado la cantidad de hogares que tiene alarma.