Los controles de la Policía Local llegan a las aldeas
La Policía Local continúa con su trabajo de vigilancia hacia las personas que infringen las disposiciones recogidas en la declaración del estado de alarma. En este sentido, desde hace días, el Cuerpo municipal colabora en los controles del tráfico y peatonales, una labor en la que también está implicada la Guardia Civil.
La novedad es que estos dispositivos policiales se extienden ahora a las aldeas. Se empezó en las que tienen mayor población. Concretamente, se realizaron controles en La Rábita, Mures, Ermita Nueva y, aunque tiene muchos menos residentes, en La Pedriza.
Por otro lado, las Fuerzas de Seguridad intensifican los controles en el casco urbano alcalaíno, sobre todo en el entorno de la calle Álamos y los accesos. La vigilancia se extiende al paseo de mascotas —recorrido máximo de cien metros— y las compras en supermercados.