La Pasión triunfa sobre las lluvias

El día grande de la Semana Santa se vivió con intensidad. A pesar del ambiente desapacible, con lluvias intermitentes, las tres procesiones previstas salieron a la calle. La primera reunió, a partir de las once de la mañana, a las cofradías del Ecce-Homo, el Gallardete, los Apóstoles y el Dulce Nombre de Jesús y Santa Caridad. El desfile se realizó sin sobresaltos, a pesar de que a lo largo del recorrido cayeron gotas. Una vez más, brillaron con luz propia los pasos, pregonados o mímicos, representados por el Ecce-Homo en diversos puntos, sobre todo en las esquinas. Una vez más la figura de Juillas —Judas Iscariote— suscitó la expectación, sobre todo de los más pequeños. El resultado fue una original representación de la Pasión, una de las tradiciones alcalaínas más señeras. Por otro lado, se vivieron momentos emotivos, como cuando la Agrupación Musical Dulce Nombre de Jesús, que interpretó una marcha de rodillas junto al convento de las dominicas mientras los costaleros “bailaban” bajo el Nazareno.

Por la tarde, otro desfile unió a las hermandades del Santísimo Cristo de la Salud y Nuestra Señora de las Angustias. Ambas imágenes protagonizaron un encuentro que hizo aflorar los sentimientos de las decenas de personas que contemplaba la ocasión. El itinerario tuvo que acortarse como consecuencia de la aparición de la lluvia, lo que obligó a los portadores de los tronos a hacer un esfuerzo para dirigirse a las respectivas iglesias, las de San Juan Bautista y las Angustias. Como novedad, este año se estrenaba la segunda fase de la canastilla del paso de la Virgen, obra ejecutada en el taller de Manuel Guzmán, en Sevilla.

Al filo de la medianoche salió la procesión del Santo Entierro, conocida popularmente como “del Silencio”. Una pausa en las precipitaciones posibilitó que se realizara sin cambios respecto de lo previsto. Miembros de diferentes hermandades acompañaron al Yacente y a la Virgen de la Soledad. De esta manera, culminó una Semana Santa en la que no pudieron salir el viacrucis del miércoles ni el desfile del jueves.