Incendio intencionado en El Coto

Sobresalto de madrugada. El segundo incendio intencionado en menos de una semana tuvo como escenario un bloque de El Coto, formado por ocho viviendas, seis de ellas habitadas. La mayor parte de los habitantes del lugar dormía a esas horas. El suceso se desencadenó pasadas las cuatro, cuando una persona prendió fuego a una moto, que terminó casi totalmente carbonizada, y a un carro de bebé. Las llamas devastaron la puerta de un piso y también ocasionaron daños en un minicoche estacionado en la zona. Una intensa humareda, combinada con aparatosas llamaradas, invadió el hueco de la escalera y, posteriormente, los domicilios. Sin embargo, no hubo que lamentar daños personales, aunque dos hermanas —una menor de diecisiete años y una joven de veintidós— tuvieron que ser atendidas en el centro de salud local porque la inhalación de humo les causó dolores en el pecho y en la cabeza.

Antonio Miguel Peláez, un vecino de un inmueble situado frente al bloque, explica que lo despertaron sus perros y que, cuando se asomó a la calle, observó cómo un hombre, residente en Alcalá e identificado como Antonio G. U. H., gritaba: “Ahora vais a arder todos”. El hombre, según fuentes vecinales, se marchó después de causar el incendio. Aunque poco después fue localizado, mientras deambulaba. Ayer por la tarde se encontraba bajo custodia a la espera de su traslado a un psiquiátrico. El presunto autor de las llamas, de unos cincuenta años, ya quemó su piso, situado en la calle Real, un suceso en el tuvieron que ser desalojadas cuarenta personas y en las que él mismo fue rescatado por los Bomberos. Después ha encendido varias veces hogueras en su domicilio. Por otro lado, el lunes a mediodía, la Policía Local tuvo que intervenir, después recibir el aviso de que el hombre caminaba por el centro de la calzada en la Avenida de Andalucía.

Reyes Ortega, una de las vecinas del bloque de El Coto y madre de las dos mujeres atendidas en el centro de salud, explica cómo vivió el incendio. “Me enteré porque el vecino salió gritando ‘fuego’ y entonces nos despertamos mi marido y yo. Al momento nuestra vivienda estaba llenico de humo. Pensamos que ardía otro piso. Intentamos bajar a la calle, pero las llamas no nos dejaban, así que volvimos y nos asomamos al balcón”, indica. Por la mañana, ella y el resto del vecindario se afanó para limpiar los restos dejados por la humareda, que ennegreció buena parte de las paredes.

precedente. Lo que está claro es que Antonio G. U. H. no es el autor del incendio aposta de dos coches ocurrido el pasado sábado. Tiene una coartada perfecta y es que, momentos antes, la Policía Local hubo de acudir hasta su domicilio porque había prendido una hoguera. Todavía se investigan los hechos del día 5, aunque, por ahora, no se han producido detenciones.