El Gobierno niega los fondos del plan de desarrollo urbano

Mazazo. Pese a los precedentes de las iniciativas Urbana I y II, el Gobierno ha denegado al Ayuntamiento de Alcalá su proyecto de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi). El Ayuntamiento solicitó la cantidad máxima, cinco millones de euros de fondos europeos Feder, que se uniría a una aportación de 20% adicional de aportación municipal. A diferencia de lo ocurrido en el caso de Martos, de Linares y de Úbeda y Baeza, la Secretaría de Estado de Estado de Presupuestos y Gastos —adscrita al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas— rechaza la petición. El motivo para no seleccionarla es “no tener suficiente puntuación”.

Sin embargo, el Ayuntamiento no desiste. Fuentes municipales indican que está a la espera de la nueva convocatoria de ayudas, que se prevé en noviembre y que la administración alcalaína “mantiene las esperanzas y las expectativas”. El Ejecutivo en la primera resolución no ha seleccionado otras propuestas, como las de Andújar y los municipios cordobeses de Baena, Cabra, Lucena y Priego.

Los contenidos del programa Edusi se aprobaron en un pleno celebrado el pasado mes de enero. Los planes fueron presentados a colectivos sociales. La administración local destacaba el aval de las iniciativas Urbana I y II —este último con una prolongación para acabar el edificio de la Trinidad—, predecesoras del “Edusi”, y la buena salud de las arcas municipales para sufragar la parte de 1,2 millones que le corresponderían al Ayuntamiento alcalaíno.

contenidos. Las iniciativas previstas con la “Edusi” hasta 2022 son múltiples y pertenecen a varias líneas. La intervención “estrella” es la recuperación del espacio de El Toril para convertirlo, con un desembolso de 1,5 millones, en un centro cultural de interés turístico. Además se desea acometer acciones de regeneración del comercio tradicional, mejoras del alumbrado público y optimización energética de edificios, un carril bici y propuestas de movilidad sostenible, la recuperación de viviendas sociales, la rehabilitación de lugares urbanos degradados —por ejemplo, zonas verdes—, promoción de la “empleabilidad” de colectivos con dificultades, el acondicionamiento de la Casa de la Juventud, medidas de eliminación de barreras arquitectónicas, fibra óptica y avances tecnológicos. La idea del plan pasa por crear o mantener puestos de trabajo.