Día grande en torno al santo

San José de la Rábita está de fiesta. El 19 de marzo es el día grande de esta pequeña aldea alcalaína, enclavada en el corazón de la Sierra Sur y cuyos vecinos profesan una especial devoción por el santo que les da nombre. No hay que olvidar que hasta el siglo XVI, las ventas que constituían este núcleo de población eran conocidas con el nombre de “Las Bermejas”. La denominación actual de la pedanía hace referencia a la construcción, en 1599, de una ermita dedicada a San José. Desde entonces, la tradición cuenta que los vecinos de esta aldea viven con emoción y sencillez estas fiestas patronales.

Ayer, San José de la Rábita vivió su día grande. Había muchas ganas de diversión en los vecinos. Y también ilusión por reencontrarse con el santo, después de que el año pasado la amenaza de lluvia le impidiera procesionar. Tal y como estaba previsto, a las doce del mediodía, comenzó la misa en honor de San José. Una celebración religiosa que contó con el acompañamiento del coro rociero “Aromas de la Sierra”. Después, en torno a la una y media de la tarde, empezó el baile con el Trío Ilusiones. Los centenares de asistentes disfrutaron de un delicioso arroz caldoso, tal y como explicó José Antonio Conde, que comparte con su hermano Jesús el honor este año de estar al frente de las fiestas de su pueblo. Las actividades se prolongaron durante toda la jornada en un alarde de convivencia y diversión para todos los públicos y las edades. Y es que, a las cinco de la tarde y con el patrocinio del Ayuntamiento de Alcalá la Real, se realizaron juegos infantiles en los que participaron numerosos pequeños, que se divirtieron de lo lindo con las carreras de sacos o con los castillos hinchables.

No obstante, el momento más esperado llegó con la procesión de San José. Numerosos fieles, llegados desde todos los lugares de la comarca, acompañaron a la sagrada imagen en su paseo por las calles de la aldea, donde estuvo al lado de la Virgen del Carmen, otra imagen a la que se profesa gran fe en el municipio. La Banda de Música “La Esperanza” brindó las marchas procesionales a esta esperada fiesta. La celebración no terminó con la procesión, ya que los rabiteños estuvieron disfrutando de la buena música y del baile con el ritmo del “Trío Ilusiones”. Han sido dos días repletos de buen ambiente y diversión, que comenzaron con una novedad: las lumbres en honor al santo que se encendieron en la víspera de la fiesta. Cientos de personas se divirtieron con la actuación de “Juan y sus teclados”. Los hermanos mayores invitaron a ricas viandas. A partir de ahora, comienza la cuenta atrás para las próximas fiestas en honor de San José.