Cuatro atendidos por inhalar humo en un aparatoso fuego

Enorme susto. Un virulento incendio declarado, en tor- no a la una de la tarde, en el número 14 de la calle Alonso Alcalá, en la Plaza del Ayuntamiento, destrozó por completo un domicilio. Como consecuencia del suceso, cuatro personas de una misma familia tuvieron que ser atendidas por inhalación de humo en las Urgencias del hospital. Se trataba del matrimonio residente en el domicilio —formado por Antonio Serrano Castillo, de 81 años, y Ángeles Aguilera Moyano, de 75—, el hijo de ambos, Antonio Serrano Aguilera, de 53, y un nieto, Jorge Serrano Aranda, de veinticinco. Todos recibieron el alta después.

Las llamas se declararon en el primer piso, aunque las humareda afectó al resto de las viviendas, sobre todo a la situada justo encima. El fuego comenzó en el dormitorio, al parecer cuando los dueños del inmueble secaban ropa en un aparato eléctrico. En un principio los propios habitantes del bloque, perteneciente a una misma familia, intentaron apagar el incendio por sus propios medios, aunque les resultó imposible.

En poco tiempo acudieron los Bomberos, en dos camiones; la Policía Local y la Guardia Civil. Al tratarse de un lugar muy céntrico, la expectación fue destacada. Los agentes de extinción de incendios trabajaron para acabar con las llamas y ventilaron el inmueble.

Antonio Serrano Aguilera, quien posee un establecimiento de venta de piensos en el bajo destaca la respuesta recibida de los vecinos de la zona y del equipo de Gobierno, hasta el punto de que les ofrecieron alojamiento. “Estamos muy agradecidos con toda la gente y con el Ayuntamiento por solidaridad manifestada hacia nosotros, además de con el hospital, donde nos atendieron muy bien”, explican Antonio Serrano Aguilera y Jorge Serrano Aranda. A pesar de las cuantiosas pérdidas económicas —en el primer piso se han visto afectados el mobiliario, los enseres, el suelo, las paredes y el techo—, se muestran aliviados de que no haya que lamentar daños personales. Los moradores de las dos viviendas más afectadas por el suceso se encuentran hospedados, de manera provisional, en casa de otros familiares.