A la espera de los análisis del trasvase del Guadalmena

El Condado “podría” volver a beber agua potable el fin de semana

27 jul 2018 / 08:16 H.

Dos semanas se cumplen hoy desde la prohibición de beber agua del grifo en trece poblaciones de El Condado. El compás de espera tendrá que alargarse, al menos, durante unas horas más. Con el trasvase de agua desde el Guadalmena al Dañador ya en marcha, como confirman algunos alcaldes de los municipios afectados, ahora los análisis deben constatar que el nivel de trihalometanos ha descendido para situarse por debajo de los 100 miligramos por litro, que es el máximo permitido para que no afecte a la salud. ¿Cuándo será? Pues los alcaldes esperan que hoy empiecen a llegar resultados, aunque sin aventurarse sobre si serán positivos y mucho menos fijar el plazo para que el agua vuelva a ser apta.

“Mañana —por hoy— va a ser pronto todavía”, explica Miguel Ángel Manrique, de Arquillos. “Ya ha llegado el agua del Guadalmena, que está menos turbia, al Dañador. Se hará el análisis y, aunque dé positivo, hay que iniciar la limpieza también de la línea en baja. A lo mejor durante el fin de semana podría reanudarse el consumo”, dice, pero con dudas. Igual de precabido es Juan Diego Requena, alcalde de Santisteban: “Nos han comunicado que ya funciona el trasvase y todavía no sabemos los resultados, aunque serán más bajos que los del Dañador. Mañana —hoy— casi con total seguridad que todavía no se confirmará que es apta. Tendrá que ser ya de cara el fin de semana”.

José Manuel Leal, de Sorihuela del Guadalimar, confiesa que, a principios de semana, cuando les informaron del trasvase, sí tenían esperanzas de que hoy estuviera resuelto, pero que ya a estas alturas es complicado. Al igual que el alcalde de Castellar, Gabriel González, que resalta que los últimos análisis, después de más de diez días, estaban todavía “altos”. Lo que sí tienen muy claro todos es que, tras sufrir este y otros problemas relacionados con el abastecimiento, van a luchar para que las obras necesarias en la infraestructura —las que se dejaron a medias en 2014— se ejecuten con la declaración de emergencia. A lo que sí le ponen algunos fecha es a las movilizaciones: el lunes empiezan.