Vecinos reclaman información sobre el “asalto” de Iznatoraf

La actividad volverá a las aulas mañana después de varias jornadas sin clase

06 jun 2016 / 13:41 H.

Las aguas vuelven poco a poco a su cauce en Iznatoraf, días después de que un hombre intentara acceder armado al colegio. No obstante, los vecinos demandan a las autoridades más información y se preguntan si es cierto que el detenido por los hechos, José María M. R. está lejos, porque, por ahora, nadie lo ha confirmado. Los torafeños creen que si se hubiera realizado alguna reunión con la participación de la dirección del colegio para explicar las medidas adoptadas y para aclarar lo sucedido, se habrían ahorrado muchas especulaciones que generan nerviosismo en el pequeño municipio.

Pocas personas dicen tener claro, a estas alturas, todos los detalles y hasta qué punto llegaron a correr o no peligro los escolares. Casi nadie salvo su propio padre y la compañera sentimental de este defienden al autor, incluso en televisión. Gran parte del resto del pueblo critica tal intervención pública frente a la indignación de muchos padres que dieron la cara para expresar su demanda de “más seguridad”.

José María M.R. intentó entrar en un centro educativo con casi setenta alumnos —de hasta segundo de Secundaria—. La rápida intervención de la directora impidió que lo consiguiera aunque sí que se coló en el recinto tras saltar el vallado, pues las puertas exteriores estaban cerradas como es habitual en horario lectivo. Se sospecha que llevaba algún objeto cortante o arma blanca y tras celebrarse un juicio rápido quedó en libertad aunque fue detenido de nuevo, al parecer para responder por varias denuncias, una por supuesto maltrato y amenazas a diferentes personas de su entorno.

El jueves por la tarde fue puesto en libertad y la Guardia Civil de Villacarrillo lo escoltó hasta la estación de autobuses para asegurarse de que regresaba a su lugar de origen, Castellón. En Iznatoraf dejó a su actual pareja, que en una aparición televisiva negó ser víctima de violencia machista, acompañada del padre del arrestado, quien también negó la culpabilidad de su hijo. Lo cierto es que en el pueblo —sobre todo entre los vecinos con niños— hay malestar y enfado pues creen que el presunto agresor puede volver. Hoy tiene juicios en Villacarrillo pero no es necesaria su presencia. Las vistas son por amenazas contra una vecina y su hija. Precisamente, no puede acercarse a ella en virtud de una orden de alejamiento. Las autoridades tratan de restar importancia al suceso y creen que no tardará en volver la tranquilidad. De hecho, los niños no acudieron a clases el jueves y el viernes, por miedo y como medida de protesta de los progenitores del municipio torafeño. Hoy tampoco hay clase, en este caso porque el profesorado eligió la jornada como día de libre disposición. Mañana martes se espera el regreso a las aulas. A los menores, de manera paulatina, se les ha pasado el “susto” derivado de la tensión vivida el último día de mayo.