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El alcalde recrimina a la oposición sus mensajes “catastrofistas” de la ciudad

01 nov 2017 / 10:55 H.

Quizá porque, de las 76 propuestas de resolución (de un total de 113) que salieron adelante en el debate del estado de la ciudad del año pasado apenas se han ejecutado 6 y la “frustración” de los grupos municipales es palpable, además de confesa, las iniciativas que llegaron al pleno de ayer fueron un 40% menos: 68. Y, de ellas, quizá también porque el portavoz municipal del PSOE, Manuel Fernández Palomino, insistió al PP en que solo apoyara a aquellas que esté comprometido a ejecutar, con el fin de no generar falsas expectativas a la población, solo se aprobaron 38: las 25 del PP y las 10 de Iván Martínez, por la complacencia se profesan, y 3 del PSOE.

La portavoz del equipo de Gobierno local, Reyes Chamorro, abrió el debate con un balance que calificó de “digno” del trabajo realizado en cada área. Destacó que la liquidación presupuestaria de 2016 fue la mejor de los últimos 8 años, que se han realizado más de 5.000 intervenciones de mantenimiento urbano, “que se pueden comprobar”, las muchas actividades culturales que han “llenado las calles” y una Feria de San Lucas memorable, a pesar de los “6 incidentes deleznables de violencia sexista”.

Pero, a excepción de Martínez, ni Víctor Santiago, ni el PSOE y JeC compartieron su relato. “[Cuando hablaba Chamorro] he estado a punto de salir al balcón, a ver si hablábamos de la misma ciudad o de otra”, apuntó Fernández Palomino. Compartió la misma sensación de Santiago. El paisaje que el concejal no adscrito dibujó fue el de “una ciudad de segunda”, “con barrios que parecen Cuba”, “600 o 700 millones de euros de deuda” y una falta de oportunidades que, ligada a una de las tasas más altas de desempleo del país, está haciendo que Jaén pierda habitantes a marchas forzadas.

No mucho mejor fue la imagen que JeC tiene de la capital. Manuel Montejo señaló una ciudad rota “en tres partes”, en cuyos extremos estarían “una minoría que se reparte los pocos” recursos que generan el Ayuntamiento y el resto de administraciones y “otra parte que está condenada a la vulnerabilidad”. En cuanto al PSOE, su portavoz municipal criticó: “No es que no se haga nada para mejorar, es que no se hace nada para paralizar el empeoramiento”. “Ustedes —acusó al PP— ya tienen en su subconsciente que su único objetivo es llegar a mayo de 2019, olvidando que esto es una prueba de obstáculos y no vale rodear el obstáculo, sino saltarlo y ganar la carrera”. Desde su posición central en el salón de plenos, el alcalde, Javier Márquez, los escuchaba con escepticismo y enojo interior. Y, cuando le llegó el turno de palabra, ya para cerrar el debate, les censuró el “producto” que estaban vendiendo. Primero, porque consideró “cicatero” que denunciaran que no se hace nada, cuando, en su opinión, el equipo que coordina “le ha metido mano a todos los temas peliagudos del Ayuntamiento” y la entidad local “respira algo mejor gracias a una mejor gestión”. Destacó que se ha cumplido la regla de gasto, la convocatoria de una oferta de empleo público y de oposiciones en Bomberos, la ayuda de 800.000 euros del Gobierno para fomentar la formación y el emprendimiento entre los jóvenes, el desbloqueo de la apertura del Museo Ibero, que Jaén acogerá el año que viene el World Padel Tour y que, “si dios quiere, se convocará un premio internacional en honor de Ibn-Shaprut. Y se lamentó: “No hay nadie peor que nosotros para pegarle a la ciudad. Si siempre estamos quejándonos de nosotros, ¿cómo se va a fijar la gente en nosotros? Los mensajes catastrofistas son una pérdida de oportunidades”.

Un plan contra la infravivienda en el barrio de Antonio Díaz

Entre las propuestas de resolución que el PP elevó al debate del estado de la ciudad destacaban las reivindicaciones a la Junta de Andalucía. Entre ellas, un plan dotado con 16 millones de euros para erradicar la infravivienda en Antonio Díaz, el cumplimiento de los compromisos aprobados para rehabilitar Las Protegidas o mejoras integrales en los centros educativos. “ Tenemos que reclamarle a la Junta porque nos debe, ¡y mucho!”, justificó la portavoz del equipo de Gobierno local, a la que el alcalde le tuvo que decir que desistiera del turno de posicionamiento del grupo.

Sin apoyo a la puesta en marcha del tranvía

“Le pedimos al PP que, si no piensa hacer nada, que no nos apruebe las propuestas”. Esta fue la petición que el PSOE realizó al Gobierno local días antes del pleno y, ayer, se ratificó en ella. De las 25 propuestas que llevó al pleno, entre ellas, la puesta en marcha del tranvía, el PP solo le apoyó 3. 2 de ellas de medio ambiente, sobre los asentamientos urbanísticos en suelo no urbanizable y la adecuación de la Cañada de las Hazadillas, y la puesta en marcha de un proyecto para conmemorar el 150 aniversario el Mercado de San Francisco.

empatía hacia salud anguita

pésame. El pleno extraordinario arrancó con un minuto de silencio por el fallecimiento, repentino, de una sobrina de la concejal no adscrita Salud Anguita, de poco más de un año. Este fue el motivo por el que la sesión plenaria que estaba prevista para el lunes se aplazó a ayer por la tarde. La concejal apareció en el salón rota de dolor y declinó hacer intervenciones. Estuvo en el pleno mientras fue necesario su voto. Esto es, en la adjudicación del contrato de la basura y en la aprobación del expediente de contratación de la operación de préstamo.

un trato diferenciado

no adscritos. Víctor Santiago e Iván Martínez están sentados uno al lado del otro en el hemiciclo municipal. Sin embargo, sus suertes son dispares. El segundo es mano derecha de Miguel Contreras en Somuvisa; el primero sigue lamentando que no tiene despacho propio, ni voz en las comisiones, y que ni siquiera aparece en los informativos de Onda Jaén. Ayer, estas suertes tan dispares volvieron a quedar en evidencia en la votación de sus propuestas en el debate del estado de la ciudad. El PP no le aprobó ninguna a Santiago y todas a Martínez.

sin respaldo a las ideas de jec

Afirmar. JeC planteó solo 8, pero el portavoz municipal, Manuel Montejo, las calificó de “estructurales” y necesarias “para empezar a cambiar el rumbo de la ciudad” y un modelo económico que, en su opinión, beneficia a una minoría, “esquilmando” lose escasos recursos del Ayuntamiento, y deja de lado a una mayoría, entre la que reconoció a los más vulnerables. Un año más, reclamó la gestión directa de los servicios públicos concesionados y la recuperación de la gestión de tasas, como la de la basura. Ninguna salió adelante.