Un quebrantahuesos fallece envenenado en Sierra Mágina

Nació en el Centro de Cría de Valcallent, en Lleida, hace cuatro años. Gracias al sistema de geolocalización que tenía instalado fue visto, por última vez, a principios de la primavera. El ejemplar hembra había llegado hasta Alicante, según los últimos movimientos recogidos por la Fundación Gypaetus, y se aproximaba a tierras jiennenses. Aquí encontró, hace unos días, su muerte de la mano de la acción del hombre. Y es que el ejemplar fue hallado muerto por envenenamiento en Sierra Mágina, en Albanchez.

El animal falleció como consecuencia de la ingesta de un cebo envenenado, tal y como determinó la necropsia y análisis realizados por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Se encontró al animal con la posición de las garras contraídas y la cola levantada, una postura típica de este tipo de casos. Además, la necropsia confirmó el envenenamiento.

Según explica la Junta, el geolocalizador es el que permitió la recogida del cadáver y ayudó a conocer sus últimos movimientos, con el objetivo de encontrar a la persona que colocó los cebos envenenados. Por su parte, la Guardia Civil confirmó que el quebrantahuesos no es el único animal hallado muerto en esa zona durante los últimos días. De hecho, agentes del Seprona localizaron, el viernes, el cadáver de un águila y otros dos cepos vacíos, circunstancia que se puso en conocimiento de Medio Ambiente y que permitió avanzar en la investigación.

Según el comunicado emitido por el Ejecutivo autonómico, “en estos momentos” se ha dispuesto un amplio dispositivo que “peina” toda la zona, en el que colaboran brigadas especializadas de la estrategia de lucha contra el veneno con la patrulla canina, agentes de Medio Ambiente y el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil. Como fruto del trabajo se localizaron más animales envenenados y otros pendientes de análisis.

temporada. Desde que comenzó el programa de liberación, el año 2006, son ya 40 los quebrantahuesos sueltos en el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas y en el de Castril, en Granada. Precisamente, la brigada de investigación de venenos granadina, integrada por 15 agentes de Medio Ambiente, logró erradicar el uso de venenos en los últimos seis años en Castril, donde han muerto cuatro ejemplares.

Todas las aves liberadas proceden de la reproducción en cautividad del Programa Europeo de Especies Amenazadas, del cual forma parte el Centro de Cría del Quebrantahuesos de Cazorla y del de Valcallent, en Lleida, de donde procedía Zafra. Como centro adscrito, parte de los pollos criados en cautividad cada año en el espacio jiennense son destinados a los Proyectos de Reintroducción, sea en Andalucía o en otros proyectos que también formen parte del programa europeo.