Un homenaje dramatizado

El Año Hernandiano está llegando a su fin, pero eso no significa que las actividades culturales relacionadas con la memoria del poeta de Orihuela vayan a cesar. Todo lo contrario. La apuesta por la conmemoración del 75 aniversario de su muerte ha dejado sobre la provincia, además de un legado a partir del que descubrir su vida y obra, la estela de grandes personalidades. El último en pasar por la capital fue Pedro Meyer, un periodista de importante trayectoria profesional que impartió una conferencia dramatizada titulada Pasión y muerte de Miguel Hernández.

Como no podía ser de otra manera, el escenario elegido para este encuentro fue el Centro Cultural Baños Árabes, ya que esta actividad formó parte de la programación de Palacios de Invierno.

De esta manera, Meyer repasó la vida del escritor gracias a un minucioso estudio que había realizado previamente. “Es un repaso por su historia. Todo el mundo conoce, a grandes rasgos, quién es y qué hizo, pero nosotros hemos indagado un poco más. Solicité cierta documentación a la sede central de la memoria de Miguel Hernández, en Orihuela, y elaboré un proyecto que puse en marcha con algunos compañeros de Radio Nacional con la que comparto esta pasión por él”.

Meyer interpretó algunos poemas, como Me llamo barro, La elegía a Ramón Sijé o Vientos del pueblo, además de algunas de sus obras más representativas.

Asimismo, los espectadores fueron testigos de un montaje audiovisual conformado por recortes de prensa y una grabación de la única entrevista que se mantiene de Josefina Manresa. “Se realizó en su casa muchos años después de la muerte de Miguel Hernández y poco antes de su propio fallecimiento. Es un testimonio vivo y muy interesante. Manresa nunca quiso irse a vivir a Madrid cuando él estuvo en la cárcel, aunque su marido le ofreció la casa de algunos amigos que la cuidarían. Era la forma que el poeta encontró para que ella pudiera visitarlo cada 15 días. Ella no aceptó y fue un momento difícil para ambos”, explicó el periodista.

Meyer afirma que “es probable” que entre los recortes de periódicos que informan sobre la vida de Miguel Hernández haya páginas de Diario JAÉN. De la misma manera, añade que sería una pena que, pasado este año, la efeméride que está poniendo en valor su memoria, se olvidase. En esa línea, concluyó: “En España tenemos esa mala costumbre de conmemorar durante un tiempo la vida y la obra de una persona y, después, no volver a recordarlo. Debería ser algo permanente que forme parte de nuestra historia”.