Un gesto que siempre emociona

La familia de un varón de 45 años autoriza la donación de sus órganos y gracias a ello se benefician cuatro pacientes

29 ago 2017 / 10:35 H.

En el que fue el peor momento de su vida, en plena despedida a un ser querido, una familia pensó también en los demás. Gracias a ello, el fallecimiento de un varón de 45 años, lo que, por definición, es un hecho triste, se convirtió en alegría para otros seres semejantes. Los seres queridos del difunto, que dijo adiós en el Hospital Neurotraumatológico por un infarto cerebral, autorizaron la donación de sus órganos. Para dar este paso es necesario, como explican fuentes sanitarias, que se trate de una muerte encefálica, lo que implica que el resto del cuerpo no está afectado por una enfermedad. Gracias a ellos y al sí de los suyos, fue posible que se transplantaran los dos riñones y las dos córneas del fallecido, por lo que cuatro personas se beneficiaron de este gesto.

Esta donación múltiple es la decimosexta en lo que va de año, con lo que esta agridulce estadística ya es mejor que la de 2016, cuando se registraron 15. Estos números de la sanidad jiennense son de los mejores de los últimos años, aunque todavía queden un poco lejos las 25 donaciones de 2013. Más cerca está alcanzar el segundo mejor hito en lo que a transplantes se refiere, que es el de 2015, cuando hubo 18. Y se que, desde que se contabilizan estas intervenciones, lo que comenzó en 1997, solo en esas dos ocasiones se superaron las 16 donaciones.

En cuanto a los 16 casos de este año, once fueron en el Complejo Hospitalario de Jaén, dos en los hospitales de Linares y Úbeda, y una en el de Andújar. Tanto el centro hospitalario ubetense como el iliturgitano, en este ejercicio, contabilizaron las primeras donaciones de órganos de su historia. Dos pacientes se han beneficiado de la primera donación de órganos en la historia del Hospital San Juan de la Cruz, de Úbeda, que permitió la donación de dos riñones a personas que los necesitaban para salvar o mejorar su calidad de vida y estado de salud. En cuanto al “Alto Guadalquivir” de Andújar, la operación permitió trasplantar dos riñones y un hígado que beneficiaron a tres pacientes necesitados de ellos. Algo muy importante en todas estas historias de solidaridad es que, hasta el momento, nadie se ha negado a que se donen los órganos del ser querido que acababa de perder.

España batió, en 2016, su propio récord de donación y trasplante de órganos al alcanzar 43,4 donantes por millón de población, con 2.018 donantes que hicieron posibles 4.818 trasplantes. De esta forma, el país se mantiene líder mundial en esta labor, coordinada por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT).

la última palabra, la de la familia

Según la ley de trasplantes, en España todas las personas son considerados donantes si, en vida, no se expresa lo contrario. A pesar de ello, es obligatorio preguntar a familiares o allegados sobre la voluntad del fallecido. En la práctica siempre se respeta la decisión de la familia, ya que se asume que estos no contradirían los deseos de su ser querido y, en la mayoría de los casos, hay consentimiento.

Éxito de la técnica “en asistolia”

La primera donación de este año en el Hospital de Linares fue la primera en este centro con la técnica denominada “en asistolia” o a corazón parado, que los expertos y la Coordinación Autonómica de Trasplantes considera que aumenta las posibilidades de éxito y supone numerosas ventajas y beneficios con respecto a la anterior. El Complejo Hospitalario de Jaén ya utilizó esta modalidad quirúrgica el pasado mayo de 2016.