Malestar por el estado de las instalaciones de oncología

Malestar por el estado en el que se encuentran las instalaciones de Oncología del Complejo Hospitalario de Jaén. Eso es lo que exponen algunos usuarios que, recuerdan, tienen que pasar muchas horas allí los días que deben someterse al tratamiento de quimioterapia. “Es desalentador acudir a la sala de espera, que es un lugar oscuro y en el que no hay sitio para todos los enfermos y acompañantes. Y a la falta de luz natural se suma la de ventilación y climatización, que en este último caso sobre todo se deja sentir ahora, con las altas temperaturas. Porque no hay cambio de aires ni ventilación”, explica una de ellas, que lleva dos meses en tratamiento y con visitas periódicas.

También apunta a que los sillones están tan pegados unos a otros que no permiten mantener una distancia mínima con la persona que se encuentra justo al lado: “Sin olvidar la confidencialidad, porque si en alguna ocasión pedimos cita con el psicólogo, que se encuentra en el Maternal y que se desplaza para atendernos aprovechando nuestra visita porque nosotros no podemos hacerlo, y nos trata en la sala de espera o en la de quimioterapia, delante del resto”.

Una situación que, sobre todo, apunta a que se deja sentir por las mañanas, que es cuando más enfermos pasan por las instalaciones y permanecen, subraya, “hacinados” mientras esperan las analíticas, la visita con los doctores y el tratamiento de quimioterapia: “Esa sala también está masificada. No hay sillones suficientes para los pacientes y, a menudo, hay que esperar en la anterior a que quede un sillón libre y lo pueda ocupar el siguiente enfermo. Todo esto muestra el desinterés, la dejadez y la falta de atención con los pacientes oncológicos por parte de las administraciones, que no derivan los recursos económicos necesarios para unas obras que llevan aprobadas desde el 2015”, recuerda la paciente.

En ese sentido, desde el Complejo Hospitalario de Jaén subrayan que recientemente se realizó una reforma integral de las instalaciones, de tal manera que se duplicó la capacidad de las salas, se instaló una consulta de enfermería nueva y un acelerador lineal, entre otras muchas cuestiones. “La oscuridad en esa zona se debe, sobre todo, a la necesidad de que las radiaciones no salgan al exterior, mientras que es significativo el cambio que se registró en el Hospital de Día, que cuenta, entre otros servicios, con musicoterapia para que, en la medida de lo posible, la estancia de los pacientes y familiares durante tantas horas sea lo más llevadera posible. Aun así, es cierto que cada vez se diagnostican más casos de cáncer y son más las personas que precisan de ese tipo de atención, por lo que están previstas nuevas mejoras, aunque por el momento no tenemos una fecha en concreto”, explican.

Unas instalaciones anticuadas que, matizan los usuarios, contrastan mucho con el personal que les atiende, desde los oncólogos hasta los enfermeros, psicólogos y, en general, todos los profesionales sanitarios: “Se trata de una plantilla que es humana y profesional; que siempre tiene una palabra amable y una sonrisa. Agradezco sinceramente la labor que cada día realizan, ya que desde luego que éste es un servicio que se diferencia, y mucho, de los que prestan otros especialistas, y por desgracia he pasado por unos cuantos. Por lo que me gustaría felicitar y dar la enhorabuena a estos profesionales que realizan un buen trabajo cada día y nos hacen sentir bien, a pesar de la dureza de esta enfermedad, a pesar de que hay pocos recursos y pésimas instalaciones”, afirma la usuaria.