La población de lince ibérico se triplica en solo diez años

El año 2017 se cerró con 58 ejemplares muertos, 41 en Andalucía

19 ene 2018 / 09:22 H.

Ciento sesenta y siete linces había en Andalucía en el año 2007. Hoy, diez años después, hay mínimo 402 solo en Andalucía y más de 547 en toda la península ibérica. La población supera el triple en tan solo diez años. Desde 2002, cuando se aprobó el Proyecto Life “Recuperación de las poblaciones de lince ibérico en Andalucía”, el número de ejemplares se ha multiplicado por seis. El consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, presentó los datos provisionales del censo de lince ibérico en Andalucía y en la península ibérica. Durante el pasado año se registró un recuento total de 547 ejemplares, de los que 402 estaban en territorio andaluz. El censo es aún provisional, ya que en Andalucía los datos están cerrados al 90%. El margen restante, como resalta la Junta, se debe al número de ejemplares que se han de controlar y la extensión de la superficie en la que viven.

Fiscal resalta que con estos datos se confirma la buena evolución de las poblaciones del felino más amenazado del planeta, que han pasado de los 94 ejemplares en 2002, con presencia solo en Andalucía, a los 547 en 2017, ya en la península. En este sentido, ha recalcado que la Junta de Andalucía se volcó en la conservación de este patrimonio natural, único de nuestra península, primero consolidando las poblaciones de Doñana y Sierra Morena y, posteriormente, iniciando reintroducciones en áreas de presencia histórica de la especie. Fiscal entiende que los resultados del censo del lince en los últimos años suponen un éxito en la conservación. De hecho, la propia Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, al constatar la positiva evolución de las poblaciones de Lince ibérico, rebajó, en 2015, su categoría de amenaza de “en peligro crítico” a “en peligro”.

Los resultados de 2017 muestran la consolidación del incremento de las poblaciones de lince ibérico. El titular de Medio Ambiente valoró los trabajos del proyecto Life+Iberlince en las áreas de reintroducción nuevas de Portugal, Extremadura y Castilla-La Mancha; donde la población crece según lo previsto, y donde se están consolidando los objetivos diseñados 5 hembras territoriales por zona de reintroducción. Junto a ello se han iniciado las conexiones entre las diferentes áreas de reintroducción, lo que indica que es viable el objetivo que se va a plantear en el futuro proyecto Life Naturaleza de conectar las diferentes áreas de presencia y reintroducción. En este sentido ya existe un intercambio fluido de ejemplares entre Guadalmellato-Cardeña-Andújar-Guarrizas y de esta última zona con Sierra Morena oriental, en Ciudad Real. Además, algunos ejemplares se han movido entre el Valle de Matachel, Badajoz y Montes de Toledo y Sierra Norte de Sevilla; y entre Doñana y Vale do Guadiana, Mértola, en Portugal.

En Andalucía, a pesar de no estar totalmente terminado el censo, se observa la tendencia estable de la población, manteniéndose en 400 linces ibéricos. El crecimiento poblacional de los últimos años se ha visto ralentizado por la influencia de la enfermedad hemorrágica, que afecta a las poblaciones de conejo de monte.

En 2017 han sufrido un repunte las muertes de lince ibérico que precisan de un análisis en profundidad, como reconoce la Junta. El año se cerró con 58 linces muertos, 41 de ellos en Andalucía. En la península hubo 31 atropellos, de los que 18 fueron en Andalucía, lo que supone 5 más que en 2016. José Fiscal indica que el factor atropello seguirá conviviendo con el programa —consecuencia de la dispersión de ejemplares en la búsqueda de nuevos territorios y alimento—, pero la Consejería seguirá trabajando por minimizar este factor de mortandad.

Orisón, Olivo, Onda y Orfeo, el plazo para “bautizar” a un lince acaba hoy

Desde principios de este año, el proyecto Iberlince “busca” un nombre para un lince ibérico que empiece por la letra O, que sea original y que no haya sido utilizado anteriormente, entre sus seguidores de las redes para bautizar a los nuevos ejemplares —cuatro de siete— que se liberarán en 2018 en la región andaluza. Desde entonces son muchas las propuestas que les han llegado. Oro, Ofelia, Olé, Okla, Orellana, Olimpia, Okey, Omega, Ósculo, Orfeo, Odisea, Okando, Ocarina, Oboe, Oasis, Origen, Oz, Opal y Otoño son algunas de las propuestas que han recibido hasta el momento. Algunos de ellos con una historia significativa de atrás. “Este es el caso de Alberto, que en su email propone Orisón u Orisson, rey íbero oretano del siglo III a. C. de la zona de Jaén. Su propuesta no es casual, y para comprobarlo solo hay que buscar en la biografía de Orisón y conocer que era un guerrillero oretano que pasó a la historia por ocasionar una noche de terror en un campamento cartaginés al introducir toros embolados con fuego que facilitaron el ataque a los íberos”, explica el problema. Desde Alemania, Bárbara propone Onuba, Obelix, Olivo y Osaka. Robert, por su parte, elige Osiris, dios egipcio de la resurrección y regeneración.