La obra del ferrocarril corta la carretera de Las Infantas

Un desvío provisional regula el tráfico por el Parque “Nuevo Jaén”

06 feb 2018 / 10:30 H.

La obra del ferrocarril avanza y corta la antigua N-323, que une la capital con Las Infantas. Ahora, varias máquinas excavadoras y diversos camiones trabajan en el movimiento de tierras necesario para construir la plataforma por la que circulará el ferrocarril. De hecho, existen dos puntos bien diferenciados en los que se ve que los operarios trabajan a un buen ritmo. Por un lado, muy cerca del Centro Penitenciario de Jaén, hay maquinaria pesada y obreros que se encargan de continuar con la construcción de la plataforma y se proyecta un puente que ha de sortear la carretera. Sin embargo, este punto fue el primero en el que se comenzó a trabajar después de que se retomaran las labores —a finales del mes de octubre”.

La novedad radica en que la empresa constructora ha iniciado otra zona de labores. Se encuentra justo a la entrada de la capital jiennense —casi en paralelo del Parque Empresarial “Nuevo Jaén”—. Allí máquinas excavadoras le han dado un gran “bocado” a la carretera que unía la capital con Las Infantas hasta acabar con casi 300 metros de pavimento. Es la zona donde se realiza el movimiento de tierras y está muy cerca de la conexión con la vía actual —por la que circulan ahora los ferrocarriles— y, a la par, justo al lado del lugar en el que conectará el trazado nuevo con el que está en uso, es decir, los trenes salen de la estación del Bulevar y a la altura del Parque Empresarial Nuevo Jaén cogen la nueva plataforma, que es la que se construye en la actualidad. Los trabajos llaman la atención, ya que se realizan a un ritmo importante.

Desvío provisional. Los coches no pueden circular por este punto de la carretera de Las Infantas. Por eso, existe un desvío provisional habilitado. Los conductores que vienen en dirección a la capital tienen que utilizar una rotonda para desviarse por el Parque Empresarial “Nuevo Jaén”. Desde esta zona empresarial —una vez que se callejea por sus solitarias vías— existe la posibilidad de incorporarse por la Carretera de Madrid. En cambio, la mayoría de los conductores optan por utilizar la conexión entre los dos polígonos y acceder a Los Olivares a través de una rotonda bien conocida porque está decorada con una hormiga gigante. Esto hace que la Ronda de Los Olivares haya experimentado un importante incremento en la tráfico de vehículos durante los últimos días. Todo el trazado alternativo está marcado por señales amarillas que indican su provisionalidad por motivo de obras. Si se quiere salir desde la capital y tomar la carretera en dirección a Las Infantas hay que acceder por el Parque Empresarial “Nuevo Jaén” o, directamente, utilizar la Autovía de Sierra Nevada (la A-44) y desviarse en la salida de Las Infantas. La obra cuenta con un presupuesto de 26 millones de euros y pretende mejorar el trazado ferroviario para adaptarlo a las nuevas necesidades y, a la par, acortar los tiempos e incrementar la velocidad media de los trenes. La modificación del trazado va hasta algo más allá de Las Infanfas. Allí vuelve a tomar el trazado que ahora se utiliza. El proyecto tiene una segunda fase, que va desde Casas de Torrubia hasta la estación de Linares-Baeza.

Los trabajos también requieren que los trenes dejen de llegar a la capital

Las obras conllevan hacer una nueva vía —con su plataforma— en algunas zonas y, también, conectarla con la que ahora hay, que se aprovechará en algunas

zonas. Por eso, el Plan de Obra

Oficial —al que ha tenido acceso Diario JAÉN— contempla el corte del tráfico ferroviario para realizar las tareas de conexión. Dependerá mucho de la evolución de los trabajos, pero será la ejecución final del proyecto —es conectar tramos nuevos con otros que ya están—. Se prevé que se haga

a finales de 2018 o durante la primavera de 2019. Sin embargo, esta tarea no se podrá realizar con los trenes en funcionamiento. De ahí que ya se contemple el corte de la vía y un plan para trasladar a los pasajeros desde la capital hasta las estaciones de Espeluy o, tal vez, de Linares-Baeza, en función de si el trayecto es en dirección hacia Sevilla,

en ese caso será a la primera estación, o hacia Madrid, en la que se enlazará en Linares-Baeza. No obstante, lo importante es que los trabajos cuenten con la dotación presupuestaria suficiente para que continúen al ritmo que ahora se ven y no se tengan que detener. En principio, el plazo era de 24 meses desde el inicio. Comenzaron en octubre después de 15 meses sin ningún tipo de actividad.