La capital “expulsa población” desde hace más una década

No se crea suficiente empleo cualificado para poder retenerlos

    29 abr 2018 / 09:05 H.

    Históricamente, Jaén es una provincia expulsora de población. Así lo establece Antonio David Cámara, profesor y coordinador del Área de Sociología de la Universidad de Jaén y alega que los motivos son, principalmente, económicos y estructurales. Por ello, indica que la provincia es incapaz de retener a su capital humano.

    En el caso de la ciudad de Jaén, Antonio David Cámara establece la combinación de dos procesos que afectan significativamente a su pérdida de población. Por un lado, Cámara afirma que la estructura económica de la ciudad no genera tejido empresarial “porque es muy funcionarial y este sector no es nada elástico”. Y, por otro, añade que muchas personas optan por marcharse a los pueblos de la periferia. “Esto es lo que está pasando. No es un drama. Sin embargo, no sabemos distinguir cuanta población de la que pierde la capital se va a los núcleos de alrededor y cuanta se va a afuera de la provincia”, explica el profesor.

    A pesar de esto, Cámara se muestra positivo, ya que, según comenta, la pérdida de población en la capital “no es tan grande en términos relativos”, pues se pierden 200 o 300 habitantes al año y subraya que, igualmente, la ciudad gana población por otra parte: gente de los pueblos que se mudan a Jaén o que quieren rehacer su vida en la capital de la provincia.

    Los estudiantes más brillantes se van de Jaén
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    Los ojos de los jiennenses más jóvenes están fijados en el horizonte de la provincia. Son muchos los que optan por marcharse de su tierra para poder acceder a nuevas oportunidades o para encontrar un puesto de trabajo acorde a sus estudios. De hecho, la gran mayoría de los mejores expedientes que han pasado por la Universidad de Jaén tuvieron que abandonar su tierra para poder continuar su carrera profesional.

    Los más brillantes, los más emprendedores. Esos son los que Jaén pierde, cada año, por no ser capaz de diversificar su estructura productiva y de crear empleo cualificado para retenerlos. Son cada vez más los jóvenes jiennenses que deciden realizar estudios universitarios y desde la UJA se advierte de que, actualmente, hay muy pocos puestos de trabajo que tengan la cualificación suficiente para muchos de sus estudiantes y se lamenta de que aquellos que se quedan terminan subempleándose en empresas donde, a pesar de tener un título universitario, no cobran ni 600 euros.

    Aunque establecen que la solución no es fácil, declaran que, tanto a nivel de capital y provincial, Jaén debería diversificar su estructura productiva con el objetivo de crear más puestos de trabajo cualificado para los jóvenes que terminan sus estudios en la Universidad. Sin embargo, apuntan que Jaén depende mucho de la redistribución y de la inversión pública. Por ello, acusan la falta de infraestructuras y de inversión. Por lo que concluyen que si la provincia no es capaz de generarla por sí sola, la gente se tendrá que irse fuera de Jaén.

    Estos movimientos de población no solo provocan que los números de la población se resientan, sino que las grandes ideas de los jóvenes jiennenses no puedan beneficiar a su tierra con la generación de riqueza y, a su vez, nuevos empleos para el resto de sus vecinos.