El Real Jaén
se apunta a la heroica otra vez

Los jiennenses son terceros tras remontar al Huétor Tájar con los
goles de Juanma Espinosa y Juanca

15 oct 2018 / 13:23 H.

Colocó la pelota cerca de la frontal del área y la mimó mientras el Huétor Tájar colocaba la barrera. No cogió carrerilla y con un toque sutil situó el esférico lejos del alcance del meta Rico. Fue un gol de bandera para encabezar la remontada. Juanma Espinosa apareció cuando más lo necesitaba su equipo y lo hizo con maestría. En los últimos partidos ha liderado la reacción de un Real Jaén que ha vivido en el alambre en los últimos dos partidos. El equipo que entrena Germán Crespo es un funambulista que ha mantenido el equilibrio en los dos últimos compromisos en encuentros de vértigo y con unos últimos minutos frenéticos. Juanma, discutido al principio, pero ahora necesario y determinante en un equipo que está llamado y obligado a luchar por el campeonato. El centrocampista de Arbuniel ya brilla con los blancos, pero necesita más acompañantes en el campo. Ahí surgió la figura de Juanca, que salió desde el banquillo después de superar una lesión cervical. Revolucionó al Real Jaén y con su sola presencia generó peligro. Estuvo activo y habilidoso para decidir el partido con un lanzamiento cercano. Delirio en la grada y en el banquillo. No era para menos, porque el Real Jaén remontó un partido frente a un rival serio y bien colocado. Los rivales tienen clara la receta y el planteamiento cuando visitan La Victoria. Optan por acumular el máximo de jugadores por detrás del balón para cortocircuitar al Real Jaén y cerrarle las vías de conexión. No estuvo cómodo el conjunto de Germán Crespo en la primera mitad. Tuvo el balón, pero no la profundidad exhibida contra el Alhaurino y el Martos. Choco y Rentero no tuvieron el pasillo de los dos compromisos anteriores y el Huétor Tájar cerró las bandas en excepto contadas ocasiones. Por dentro, Mario Martos también estuvo bien marcado y solo llevó peligro cuando pisó el área granadina. El goleador Antonio López apenas entró en juego y solo protagonizó un remate en un lanzamiento raso. El Huétor Tájar tenía las ideas claras y supo esperar su momento. Primero lo hizo con timidez y después dio un salto que puso en duda, otra vez, a la defensa local cuando el rival empezó a acercarse a su área. Fue un partido áspero sin ocasiones en este periodo y que dejó todo abierto para la segunda mitad. Fueron 50 minutos intensos y en el que el Real Jaén vivió un tobogán de sensaciones. No completó un buen juego, pero nunca se rindió ante un digno rival bien situado en el campo y con las ideas claras, solidario y en el que Joaquín fue un calvario para Rentero y Moha. El hispanomarroquí fue una de las novedades en la alineación. Germán Crespo valora su polivalencia, pero de interior no funcionó ni por la derecha ni por la izquierda. Mientras, el Huétor Tájar crecía y cada vez estaba más cómodo en el césped. No creaba situaciones importantes de peligro, pero merodeaba el área de Ángel de la Calzada. Y en una de ellas llegó el claro penalti que transformó Gadea con una tranquilidad pasmoso. El gol lo acusó el Real Jaén, que estuvo alguno minutos perdido en el campo. El Huétor Tájar se pertrechó en su defensa y siguió el plan inicial, aunque ahora con un botín más sabroso. El Real Jaén tiene un fondo de banquillo con jugadores de calidad y Crespo recurrió a tres atacantes Juan Carlos, Juanca y Jorge Vela. Ahí cambió un partido que ya se jugó en el área granadina. Juanma Espinosa batió en una falta directa a Rico y la locura se desató en La Victoria. Este equipo tiene calidad y una fe que mueve montañas y en otra acción de estrategia concretó la remonta. Juanma sacó otra falta, el balón rechazó en la barrera y a continuación un defensa visitante despejó de forma frontal, lo que permitió que Juanca recogiera el balón y de disparo cercano batiera al portero visitante. Otra remontada en cinco minutos y euforia entre una afición que vive un estado permanente de sufrimiento desde 2014. El Huétor trató de reaccionar, pero no es lo mismo con el marcador en contra. El Real Jaén, además, también recurrió al otro fútbol, el que algunas veces le ha perjudicado de forma notoria. Los recogepelotas desaparecieron y apenas se jugó en el tramo final. Victoria y una semana fantástica con pleno de nueve puntos, que sitúa al equipo tercero con diecinueve a uno de El Palo y el Motril, los líderes de la competición. El equipo blanco se ha acostumbrado a las remontadas en frenéticos finales, con un juego de vértigo y un derroche de corazón. Las alternativas funcionan y no siempre proporciona resultados el fútbol control basado en el toque. El juego directo y la estrategia son también válidas en una categoría en la que conviven futbolistas de calidad con trabajadores que no son profesionales. Ahora, la próxima parada será en Torredonjimeno frente a un rival herido y que cuenta con un bloque interesante y luchador.