El 80% de alcohólicos lo supera

La Asociación Vive Libre destaca que la mayoría de
las personas que acude a ellos logra salir de la adicción

15 abr 2018 / 10:52 H.

Una adicción de la que se sale. Es el mensaje que comparte Manuel Llavero, presidente de la Asociación de Rehabilitación para Enfermos Alcohólicos Vive Libre. En su noveno aniversario aprovechan para hacer balance de la situación del alcoholismo en la capital y destacan que, de las personas que ellos atienden, el 80 por ciento lo supera, mientras que más o menos el 20 abandona el tratamiento o “se resigna” a continuar igual con su vida. Sin embargo, “el que se queda en la asociación y sigue los métodos de trabajo, sale de su problema, está demostrado”, destaca Llavero. Para ello, desde el colectivo hacen un “gran esfuerzo” para ofrecer a la ciudadanía un trabajo en equipo profesional, todos ellos voluntarios, junto con la colaboración del centro provincial de drogodependencia, con quienes trabajan “muy estrechamente”. Una de sus políticas principales es no pedir una cuota a los socios para facilitar el acceso a los tratamientos a “cualquier persona que lo necesite”. “La sensación de familia en el grupo es muy importante y eso ayuda a una evolución mayor, tal como destacan los propios miembros de la familia”, declara el dirigente del colectivo.

“Vive Libre” es una de las asociaciones “más pequeñas” de la capital, tal como destaca el propio Llavero. Un grupo limitado pero que, poco a poco, creció para dar lo oportunidad a los ciudadanos de recuperarse de su adicción con talleres e información. Actualmente atienden a una media de veinticuatro personas anualmente que se ponen en tratamiento y, según el porcentaje de los que lo superan, unos veinte salen adelante. Llavero explica que para ellos es “un logro” ver cómo los familiares observan, de primera mano, cómo se puede regresar “a la normalidad” después de la pesadilla del alcoholismo.

Desde la asociación subrayan la importancia de la participación de la ciudadanía y, en especial, en admitir un problema para enfrentarlo y encontrar una solución a una enfermedad que afecta no solo a la persona, sino al entorno familiar y laboral. “Cuando hay problemas de alcohol y drogas no se debe esconder, hay que dar el paso adelante, pues actualmente disponemos de medios para actuar”, asegura Llavero, que recalca cómo “el dinero no es la base para solucionarlo todo”, y explica que ellos son una prueba, pues ofrecen ayuda de forma gratuita. “Pensar que con los tratamientos más caros se sale de la enfermedad es un error, el dinero no lo arregla todo y aquí trabajamos en equipo para avanzar”.

Como fundador del colectivo, Llavero se siente “muy orgulloso” por los logros obtenidos en la asociación y en las personas que han atendido a lo largo de los años, así como en la confianza que se depositó en ellos. “Sabemos lo difícil que es ir de una asociación a otra, de un grupo a otro, y no ver resultados, por eso creemos que darnos una oportunidad es una gran muestra de confianza que agradecemos”, manifiesta.

“No te preocupes, no estás solo”. Es el mensaje que repiten a los que cruzan las puertas de la asociación que, en su noveno aniversario, se vivieron varios momentos emotivos, sobre todo al recordar a los compañeros que no se encontraban entre ellos. A la cita acudió la diputada de Igualdad y Bienestar Social, María Eugenia Valdivielso, y la gerente del Patronato de Asuntos Sociales, Carmina Carazo. En la mesa también estuvieron Encarna Cazalilla y Alicia Casado, ambas de “Vive Libre”.

nueve años para crecer en confianza

Los fundadores de “Vive Libre” pertenecían a otra asociación y decidieron crear la suya propia. Admiten que tuvieron varias dificultades al inicio, pero se sienten “muy orgullosos” de su crecimiento a lo largo de estos nueve años y del aumento de socios, así como de la repercusión obtenida en la ciudad, que cada vez “va a más”. “La gente que no nos conocía decidió confiar en nosotros y han visto que ha merecido la pena”, dicen.

de una cochera a despachos

En el año 2010 “Vive Libre” inició las obras de su nueva sede, en la calle General Chamorro. Comenzaron trabajando en una cochera y, actualmente, disponen de despachos, salas multifunción para realizar sus talleres y un amplio salón para las charlas y los debates. “Tener una buena sede para cubrir las necesidades de las personas es esencial para nosotros”, apunta el dirigente del colectivo, Manuel Llavero.