Se nos está yendo la vida

La vida se la lleva la muerte, pero la vida se va cada día en tantos momentos y en tantos lugares, donde un hermano, tal vez sin nombre, va dejando a tirones su dignidad. Mientras desde nuestros púlpitos políticos o religiosos, guardamos silencios cómplices que a lo sumo convertimos en oración, pero que no cambian los corazones, ni la realidad ni la razón. “Se nos esta yendo la vida”... cada día, cada hora, cada ola, cada patera... Muertes en el Mediterráneo casi siempre de color negro. ¡Muerte negra! Rostros de pobreza, madres en soledad, niños bellos con color de hambre, olas “tragavidas”... ¡Qué sin razón! ¿Dónde están los que negocian la vida, que negocian muerte y no ponen solución? ¡Se nos esta yendo la vida!... de tantos que dieron vida y hoy tienen pensiones de muerte, de tantos que forjaron juventud y hoy son excluidos del mercado laboral, de “tantas” que fueron y dieron vida y hoy malviven con salarios de desigualdad o mueren de manera injusta y por maldad. ¡Se nos esta yendo la vida! Busco luchadores incansables que pongan semillas de vida y dignidad para todos por igual, que dejen de mirarse a los ojos y miren a los demás por igual, que arrimen codo con codo a los demás construyendo presente y futuro para todos por igual, que se dejen la vida, si es posible, para hacer de esta vida una parcela de tierra celestial donde todos seamos hermanos y nadie sienta que está de más. Ayúdame a retener la vida y que cuando se vaya lo haga al natural.

JULIO MILLÁN MEDINA, presidente de la Fundación Mensajeros de la Paz