Urdangarin, otro condenado

14 jun 2018 / 08:19 H.

La Sala de lo Penal del Tribuna Supremo rebajó solo en cinco meses la condena inicial por el caso Nóos para el marido de la Infanta Cristina, Iñaki Urdangarin. La condena era a seis años y tres meses de cárcel, según lo dictado por la Audiencia Provincial de Palma de Mallorca, en virtud a los delitos relacionados con ese supuesto instituto sin ánimo de lucro que estuvo a punto de dinamitar la propia institución monárquica. El Tribunal Supremo tampoco atiende la petición de la Fiscalía de aumentar la pena hasta los diez años y es que, precisamente, en uno de los delitos la sala entiende que no está probada la participación del que fuera jugador de balonmano en la falsedad de documento público. En cualquier caso, Urdangarin cada vez está más cerca de entrar en prisión y con él un modelo de negocio que aprovechaba las prebendas de dinero público para medrar políticamente. El chiringuito financiero no mejoró en nada la sociedad como argumentaba el ahora condenado, lejos de eso solo sirvió para rentabilizar su marca personal al albur de una corona que salió malparada de los negocios de uno de sus privilegiados integrantes. En la parte política se trataba de agradar a un integrante de la monarquía para lograr mayor prestigio en la carrera de cada uno de los políticos que permitieron estos atropellos con dinero público. Todo el proceso es lamentable de principio a fin y está bien que ahora el creador de “Nóos” y su lugarteniente, Diego Torres, sean condenados por los delitos antes mencionados. Desde un principio a este proceso se puso bajo la lupa pública por los privilegios que pudieran tener los procesados y cuando llegan las condenas también es de recibo destacar que el mecanismo judicial funcionó.