Un juzgado abocado al fracaso

13 jun 2018 / 08:27 H.

Los juzgados especializados en cláusulas suelo, vencimiento anticipado, intereses moratorios y gastos de formalización de hipotecas están prácticamente colapsados. La provincia es un claro ejemplo. El de Primera Instancia 2-bis ha recibido 5.446 demandas, es decir, una media de 15 cada día. Sin embargo, solo ha tenido capacidad para incoar 2.000 procedimientos. Quedan más de 3.000 demandas sin registrar, lo que dará lugar a demoras de más de un año solo para dar salida a las denuncias presentadas por los clientes, una situación que, aunque beneficia a la banca, desanima a los consumidores a la hora de reclamar. Jueces, abogados, procuradores y funcionarios pusieron el grito en el cielo justo cuando empezó a caminar oficialmente el nuevo juzgado exclusivo de las cláusulas suelo, ya que este tipo de organismos están preparados para soportar una carga, como máximo, de 900 asuntos anuales. Se trata, en este sentido, de un problema de Estado, una patata caliente que tendrá que resolver la nueva ministra de Justicia, Dolores Delgado, ya que la situación que se vive en Jaén es extrapolable al resto de provincias. La solución pasa por incrementar el número de juzgados, y en consecuencia el personal, para poder atender las quejas bancarias. Hay que tener en cuenta que, desde que se presenta la demanda judicial hasta que el juez firma la sentencia, pueden pasar hasta 24 meses. Y, en la capital, solo para que el asunto sea admitido a trámite, hay actualmente una lista de espera de más de un año. Después, es necesario desarrollar todo el procedimiento, lo que conlleva un tiempo importante. La ciudadanía tiene la sensación de que la Justicia es lenta, un hándicap difícilmente de enterrar sin inversiones.