Robos nocturnos en el campo

Es habitual ver, en octubre, cuadrillas de aceituneros en los campos jiennenses. Cada vez son más los olivareros que apuestan por la elaboración de aceite de cosecha temprana y, en este sentido, el periodo de recolección de aceituna se adelanta en una provincia en la que se prevé que habrá una excelente campaña. No es obligatorio, pero sí es recomendable avisar a la Guardia Civil si hay sospechas de robos en el campo. Son muchos los agricultores que, cuando cae la noche, buscan “oro líquido” de excelencia con el que conquistar los mercados más exigentes. Para conseguir el mejor aroma y la mayor variedad de sabores, se opta por una recolección en frío que es más favorable en horario nocturno. Los agentes realizan su trabajo preventivo cuando escuchan maquinaria y ven trasiego en las fincas. Su objetivo no es más que identificar a las personas que están allí y comprobar que son los propietarios o sus empleados, un esfuerzo que resultaría innecesario si quienes tienen previsto salir al campo de noche lo notificaran en los cuarteles más cercanos. No es necesario un permiso especial, pero es importante por el bien de todos, tanto de quienes velan por evitar robos en el campo, como de aquellos que tienen su sustento económico familiar a la intemperie. Ni que decir tiene que estamos en un momento en el que resulta fundamental que los olivareros encuentren cada vez menos trabas administrativas para realizar sus labores en el campo y, eso sí, acaten la normativa vigente para evitar situaciones de injusticia entre sus asalariados. Los sindicatos están obligados a exigir el cumplimiento de la legislación, vigilar que todo esté en orden y avisar cada que se produzcan anomalías en campaña.