Proyectos que nacen caducos

El ciudadano jiennense está curado de espanto ante cualquier iniciativa o proyecto de cierta envergadura que atañe a Jaén. Incluso así, no dejan de sorprender la “burocratización” de las promesas políticas con la capital. La proyectada Ciudad de la Justicia, como la Ciudad Sanitaria, son un ejemplo de lo fácil que es comprometerse políticamente para luego abandonar a su suerte solares, promesas y voluntades. A comienzos de este siglo, se avanzó por parte del Ayuntamiento para que el solar —ahora de vuelta a la actualidad por el yacimiento de Marroquíes Bajos— estuviera a disposición de la Junta para que la Consejería de Justicia acometiera las obras. Sin embargo, como otros tantos proyectos, no se hizo absolutamente nada y la propia alcaldesa Carmen Peñalver tuvo que prorrogar el acuerdo hasta 2010 a la espera de que se dotara de fondos la obra. Sin embargo, todas las prórrogas acaban por agotarse y ahora el actual equipo de Gobierno recuerda a la Junta que tampoco se podrían iniciar unas “supuestas” obras en estos terrenos porque se carece ya de licencia, según el Ayuntamiento caducó en 2015.

Un eterno retorno de tiras y aflojas que acaban quedando de la peor forma posible en el subconsciente de los ciudadanos, que se quedan con la sensación de ninguneo y que las grandes inversiones para la ciudad siempre se pueden relegar. Es un hecho que debería replantear toda la estrategia política sobre proyectos que ya solo están en los medios de comunicación porque, por desgracia, de la agenda política se cayeron y solo se acude a ellos para dar una lejana sensación de que se está sobre ellos. Para este viaje, directamente, sería mejor no crear falsas expectativas.