Parques sin vigilancia

11 dic 2018 / 12:04 H.

La asociación de vecinos del Bulevar denuncia desde hace meses el deterioro paulatino de la convivencia en los dos parques del barrio. Vecinos y colectivos ligan la pérdida de la seguridad privada del parque con peleas entre menores y con actitudes incívicas que deterioran el parque a su vez. Como en tantas otras ocasiones que tiene que ver con la gestión de prestaciones municipales la falta de dinero está detrás de no poder renovar unos convenios o sacar a concurso plazas que sean atractivas para las empresas privadas. Aun dando por hecho estas limitaciones resulta difícil de entender que dentro de la amplia plantilla municipal no hay opción de encontrar el perfil adecuado para que estos parques con tanta actividad cuenten con esa vigilancia pasiva para contrarrestar comportamientos incívicos y problemas de seguridad. Desde una de las asociaciones de vecinos del barrio se hace hincapié en que son ya cuatro las agresiones sufridas en los últimos meses por menores y da la sensación que la impunidad impera en el parque.

Si a las agresiones se suman robos, desperfectos en las zonas comunes o que el parque se convierta, a determinadas zonas, en un campo abierto donde los perros campan a sus anchas sin que nadie recuerde a sus propietarios que está prohibido, la sensación de descontrol es un hecho. Convendría al Ayuntamiento, como administración cercana, tomar cartas sobre el asunto de inmediato, al margen o no de la cercanía de unas elecciones municipales, si no porque es una verdadera lástima que un espacio público tan estupendo dé la imagen que da ahora. Las fuentes ornamentales rotas y las vallas que se prodigan por doquier y otros elementos sin arreglar dan una pésima imagen. Una pena.