Oportunidad de promoción

La edición número 65 de la Vuelta Ciclista de Andalucía, que empezó ayer y terminará el domingo, cuenta con cinco etapas en las que, en dos de ellas, la provincia adquiere especial protagonismo. Se trata de un magnífico escaparate para mostrar la comunidad andaluza como destino turístico y deportivo. Hay que tener en cuenta que las imágenes de los lugares por los que pasan los ciclistas se pueden ver en las televisiones de todo el mundo, lo que supone un ejercicio de promoción muy interesante que repercute en todos los aficionados a este deporte. La primera etapa discurre por la provincia de Cádiz con meta en Alcalá de los Gazules, mientras que hoy se celebra la segunda entre Sevilla y Torredonjimeno. La tercera será el turno de la contrarreloj individual entre los municipios jiennenses de Mancha Real y La Guardia de Jaén. La provincia granadina será la protagonista de la penúltima etapa con salida en Armilla y llegada en Granada y, el domingo, desde Otura se tomará la salida a la quinta y última etapa, que finalizará en Alhaurín de la Torre, en Málaga. Estamos, en este sentido, ante un acontecimiento deportivo de máximo nivel y una oportunidad especial para que Jaén pueda alardear de la marca “Paraíso Interior” dentro y fuera de España. Ningún deporte está más vinculado al territorio que el ciclismo de carretera, no solo porque pasa y hace uso del lugar, sino también porque puede atravesar casi todos los sitios donde hay un camino pavimentado y, además, a una velocidad idónea para que el pueblo o la ciudad pueda ser contemplado en todo su esplendor. Lástima que la capital no sea “diana” de esta edición por problemas económicos con la organización y lástima que no haya ciclistas jiennenses en el pelotón.