Jaén, a la contra de Andalucía

24 abr 2019 / 13:16 H.

El rastro que dejan los fríos datos estadísticos que estudia, compara y analiza el informe de Analistas Económicos de Andalucía tiene un hito que deja en una situación, que no por conocida, deja de ser muy delicada para la provincia. En concreto, el que analiza los indicadores empresariales de la provincia en relación a las ratios entre sociedades creadas y disueltas. Y es que las primeras se redujeron en un 0,9% y las segundas se incrementaron un 24,6% en clara confrontación, según el informe, con las cifras de Andalucía. De esta forma el baremo entre disueltas/creadas (índice de rotación) se sitúa en la provincia el 31,6% (20,8% en Andalucía), un empeoramiento del índice de 6,5 frente a la mejoría de 1,9. Un dato demoledor sobre el que debería pivotar toda la próxima campaña electoral, al menos, en cuanto a municipales se refiere. Con este modelo productivo en el que se destruyen empresas a este ritmo es inviable poder atajar la emigración del talento y la despoblación que ya es un eje temático de la política andaluza y jiennense. Jaén sigue perdiendo competitividad con respecto al resto de la economía andaluza y eso es un auténtico jarro de agua fría no ya para la convergencia europea, sino con las provincias vecinas. Con un ciclo agrario que cada año requiere de menos trabajadores, con un turismo que, aunque con buenos datos, no es un pilar de contratación y diversificación económica, el que las sociedades empresariales se destruyan es un calvario para el presente y para el futuro y expone con clarividencia las ya conocidas carencias en materia de comunicaciones, transportes e incentivos que no solo no atraen a nuevas empresas, sino que acaban con la paciencia de las que se crean.