Infraestructuras para Jaén

La lluvia de millones de euros de inversión que el presidente del Gobierno anunció en su visita a Cataluña contrasta y mucho con lo cicatero de su Ejecutivo con Andalucía y, en concreto, con el transporte ferroviario. De momento el Ministerio de Fomento, según sus propios cálculos, ha invertido más de 13.000 millones de euros en completar el corredor mediterráneo, pero el gran problema, desde el punto de vista de la óptica andaluza, es que la mayor parte se ejecutó en la Comunidad Valenciana y Cataluña. En Andalucía, sin embargo, se invirtió en menor medida y en lo que respecta al eje central del corredor mediterráneo —la línea Algeciras-Bobadilla— se puede decir que es anecdótica. Los movimientos reivindicativos en Almería o la cumbre de presidentes de Diputaciones Provinciales de Jaén ponen de manifiesto la sensación contrastada de agravio comparativos con otros territorios. En el caso de Almería, la Mesa en Defensa del Ferrocarill acude a Bruselas para reclamar ante la Unión Europea que los fondos europeos no se reparten en este proyecto de manera equitativa. Pero, al menos, en la conexión entre Almería y Murcia, se han ejecutado 693 millones. Lo que ni tan si quiera es una prioridad para el Gobierno de Rajoy es la línea entre Algeciras-Bobadilla. Una inversión, que tal como se denunció en la “Declaración de Jaén”, no llega a 1.300 millones pues solo se trata de modernizar líneas ya realizadas. Sin embargo, y a pesar de una prioridad estratégica para provincias de Andalucía y Castilla La Mancha, el Ejecutivo central solo ha invertido 50 millones en los últimos años. O el Gobierno se compromete con Andalucía y, en concreto, con Jaén o solo desde el sectarismo se podrá explicar la situación.