Falta de voluntad de diálogo

Pronto hará un año de la constitución de la comisión técnica del tranvía y el resultado es que falta entendimiento entre las administraciones implicadas para poner en funcionamiento una infraestructura millonaria abandonada por falta de dinero y por exceso de desidia política. La llegada a la Alcaldía de Javier Márquez abrió las puertas del entendimiento entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Jaén para, al menos, estudiar una solución a la paralización de la red tranviaria. Sin embargo, los expertos se reunieron solo en una ocasión y, aunque haya estudios técnicos que demuestran que los especialistas continúan con su trabajo, la realidad es que hay incumplimiento de las expectativas generadas en su día y de los plazos previstos. El problema es hace falta financiación y, sobre todo, voluntad política. El consejero de Fomento, Felipe López, culpa a la Administración municipal de ralentizar y dilatar su puesta en marcha. Considera que hasta que el Ayuntamiento no considere el proyecto una prioridad, no habrá posibilidad de dar pasos hacia adelante. La respuesta del alcalde no se hizo esperar y, en una improvisada rueda de prensa, arremetió contra la Junta de Andalucía, a quien responsabilizó de dar largas como salida a la falta de liquidez para inversiones, motivada por la imposibilidad de cerrar el presupuesto autonómico para 2017 ante la continuidad de un gobierno central el funciones. Después de cinco años con la mayor inversión bloqueada, es hora de asumir responsabilidades de todos los colores políticos y arrancar los motores de una infraestructura reclamada en otras muchas ciudades que velan por un transporte público de calidad y compatible con el medio ambiente.