Agua que es bien recibida

13 mar 2018 / 09:07 H.

La provincia de Jaén ha visto cómo, en los últimos días, la preocupante situación que afrontaba por la escasez de precipitaciones se ha visto aliviada. Distintas borrascas, prácticamente encadenadas unas con otras, han posibilitado una mejora palpable de la situación de lo embalses ubicados en territorio jiennense e, incluso, como se apuntó en los últimos días, algunos de los pantanos de la cuenca han tenido que aliviar agua ante el rápido llenado que han experimentado. De hecho, ante este nuevo panorama, se plantea la posibilidad de llevar a cabo una mayor dotación para el riego, lo que puede repercutir de manera muy positiva en la próxima cosecha de la aceituna. El campo no es el único beneficiado de estas precipitaciones. Las reservas para el consumo humano reciben también un notable empuje y consiguen alejar, por el momento, el “fantasma” de las restricciones en el suministro. En cualquier caso, no se pueden echar las campanas al vuelo. Más aún si se tiene en cuenta el descenso continuado de las precipitaciones en los últimos años. Incluso, implicó la caída persistente de las reservas e hizo necesaria la activación del Plan Especial de Sequía, recientemente aprobado y que contempla distintas medidas. Este tiene como fin minimizar los aspectos ambientales, económicos y sociales de eventuales situaciones de sequía, como la que actualmente afronta la provincia de Jaén. Es tremendamente importante la llamada a la concienciación ciudadana para un consumo responsable del líquido elemento, comportamiento que no solo debe adoptarse en los periodos en los que hay situaciones de escasez de precipitaciones, sino que debe ser un modo de actuar y un hábito permanente.