Venganza catalana

22 oct 2017 / 11:21 H.

En las últimas fechas se han producido en Cataluña una serie de acontecimientos que nos han demostrado la insensatez de un “govern” autonómico que, teniendo como objetivo lograr la independencia, no tiene ningún reparo en llevar a la Autonomía Catalana a la completa ruina económica y al enfrentamiento entre sus ciudadanos. Arrogándose la representación de toda Cataluña emplean armas como la falsedad de mensajes a los ciudadanos, referéndum sin ninguna garantía, el engaño a sus conciudadanos prometiéndoles conducirlos a un paraíso independentista que, al igual que las promesas yihadistas, les harían vivir en un nuevo país sin corruptelas, injusticias y modelo de la solidaridad, igualdad y libertad. Los encargados de tal menester reciben las órdenes de Artur Más, que a su vez las recibe de la familia Puyol. Los dos lacayos principales son el “muy honorable” Puigdemont (elegido por aquél por su fanatismo) y el menos honorable Oriol Junqueras, extraño personaje que, con cínica verborrea, emplea los mejores principios de un cristianismo budista, aprendido de Ghandi, y falso profeta que llega a arriesgar, con sus resistencias pacíficas la integridad de hombres, mujeres y niños. Colega de quien les escribe esto, en la misma área de conocimiento (Historia Moderna), tiene entre otras publicaciones: “Els Catalans/Cuba” en el que, entre otras necedades y falsedades históricas , afirma que los catalanes tienen mucho de franceses e italianos, mientras los españoles nos hemos mezclado con portugueses y moros (como los nazis pero en bueno).

Por si fuera poco este “vocero”, hay otro, en el Congreso de los Diputados, Joan Tardá, de estrambótico aspecto que al igual que el anterior se apropian y predican el “pacifismo” y las buenas maneras proclamándose campeones de ellas y presentándolas como las únicas armas de un falso victimismo, consustancial al pueblo catalán, para conseguir la Independencia. Estos “predicadores” llegan a afirmar que los catalanes han sido siempre, siempre, un pueblo pacífico por su genética y mentalidad. Sin embargo si vamos a la Historia les recordaría el episodio de los almogávares catalanes. Estos guerreros mercenarios, al servicio de la Corona de Aragón, dejaron huella imborrable en la Historia por su ferocidad y falta de humanismo pues, en Grecia, hicieron auténticas salvajadas con hombres mujeres y niños hasta el punto que, aún hoy, al cabo de los siglos, cuando allí alguien maldice a otra persona dice: ¡venganza catalana te alcance! Son ignorantes de las vergüenzas propias cuando estas no convienen y es más grave aún cuando lo hace un “profesor de Historia” llamado Oriol Junqueras o el “periodista” Puigdemont.