Vacaciones “sine die”

11 abr 2016 / 17:00 H.

Vamos, nene, dale al carrete. Pues sí, ya pasaron más de cien días y seguimos más felices que unas castañuelas. Para un mal gobierno, mejor esperar que las aguas mil de abril, reblandezcan conciencias. El pastor santificó sus fiestas en Doñana, donde la corte de linces le dio la bienvenida y el hombre se alejó de los malos ratos. ¡Qué cara más dura la de don Mariano y sus acólitos! Estos pasan más de la mitad de cainitas a pájaros de cuentas. La prole de aforados y sus huestes están laborando a media jornada, aunque claro está que cobran puntualmente y cada mes sus emolumentos. Aparecen para dar explicaciones por el Congreso, cuando les sale del alma. Felicitaciones por la espantá al ministro de Defensa y a la señora de Fomento. Y es que son únicos. Vaya con el paisano, un talento bien aprovechado de Harvaard. Con qué habilidad don Cristóbal Montoro cuadra números y culpa a diestro y sinisetro de sus carencias. Que el incumplimiento de deuda con la comunidad lo hayan provocaado las comunidades autónomas y los tratamientos de la hepatitis C. Lamentable trilero de cara tan dura. Para este último menester, la deuda se incrementó en un 0,1 %. Coja usted la lupa como Rompetechos y láncese al agua. Que según estudios muy documentados, hay dinero extraviado en más de 8 billones de euros. Ancha es Castilla y el canal de Panamá; por allí navegan desde la hermana del emérito rey, peloteros, futbolistas, moteros y toda la buena gente que ensancha el canal. Aquí que le queremos tanto, después de sacar los santos, ni la falta de lluvia hizo que bajara el paro, por lo que somos líderes. No conozco la floración del valle del Jerte, donde tanta vistosidad da el cerezo. Pero ay qué bien poliniza el azahar por Valencia, la corrupción ha dado con que de los 10 concejales que tiene el PP, a 9 se les haya dado la baja “en diferido” y a la leona, pues claro, aforada. Pobre mujer tan criticada por sus buenas haciendas de repartir naranjas. Aunque tampoco escatimó cinco mil euros para alquilar un taxi todo el día en Londres.