Una visita
no grata

22 jun 2017 / 11:58 H.

El cambio climático ya está aquí. Ha venido a visitarnos y su presente como obsequio es un retorcido tirón de orejas que nos levanta de plano. De un momento a otro sé que muchos van a empezar a jurar en arameo. Como este calor insufrible nos siga atosigando, ya lo creo que lo harán, yo la primera. La naturaleza nos está azuzando sin ninguna piedad. Antes pensábamos: “Bah, ganas de alarmar”, “Bobadas para que le miremos a la cara a estos científicos de pacotilla”... ¡Pues ya está aquí el cambio climático! El calor nos abofetea sin ninguna compasión. Nos lo merecemos. No escuchamos las voces de los sesudos hombres de ciencia. No estamos en absoluto concienciados, nuestros esfuerzos llegan a reciclar envases y papel. Mares sucios, infinidad de plásticos infectos pululando por tierra y mares si ponerle un veto radical. Pesticidas a tope, sin un reglamento severo y exhaustivo, ríos contaminados, como vertederos públicos, vertidos industriales tóxicos con mucho guante blanco y levedad amonestados y muchos etcétera por contar.