Retos pendientes

06 ene 2019 / 11:18 H.

Tras cuarenta años de Constitución, no podemos hacer más que un balance positivo. Si bien desde el último decenio aparecen síntomas que son: Retos pendientes. Hay temas en los que en lugar de avanzar, hemos ido hacia atrás. Reconocerlo es la mejor forma de rectificar el rumbo de estos últimos 10 años. En 1978 todos íbamos a los mítines de todos. Necesitamos de nuevo: tolerancia, honradez, convivencia y paz. Poner luz a todo lo malo sucedido, para que no se vuelva a repetir y divulgar quienes lo hicieron. No todos somos iguales. La democracia se altera por la demagogia y la corrupción. No nos viene dada: cada día hay que “pedalear” para no terminar en el suelo. Tenemos que enseñar a los intransigentes que el valor reside en no poner más barreras que la Ley. Descubrir a los falsos profetas que predican la desobediencia a “la ley democrática” y promueven “el enfrentamiento”, sea con el apellido que sea. Favorecer la confrontación de ciudadanos por puro mesianismo es sucio. Quien invoca el incumplimiento de las leyes favorece el odio y la desigualdad. Sin seguridad y sin legalidad, no hay igualdad, fraternidad ni justicia. Por ello: respeto.