Que pongan un consultorio

Entre los años 1947 y 1984 hubo en la radio un famosísimo consultorio, el de Elena Francis. Pues bien, sus sustitutos están al caer. Puesto que nada de lo hecho hasta ahora en este bendito país es correcto, vamos a ponernos en sus manos a ver cómo nos va de hoy en adelante. Si ustedes piensan que, en cuarenta años de democracia, se habían hecho grandes esfuerzos y se habían aunado voluntades para llegar a disfrutar de las garantías democráticas que tenemos e íbamos por buen camino, se equivocan. Tenemos repartidos a lo largo y ancho de España una serie de iluminados dedicados a hacer lo contrario de lo que haría cualquier persona con sentido común. No aceptan millones de euros para mejorar la sanidad porque detestan el dinero ajeno, que no el suyo. Quizá don Rafael debió consultarles si esforzarse o no para ganar, o si debía cambiarse su reloj tan español. Se ve que homenajear a nuestros héroes tampoco es de su agrado. Que pongan un consultorio para estar ocupados. Preocuparse solo de buscar datos sobre la corrupción de otros es hacer muy poco para lo que cobran.