Promotor de la igualdad

24 mar 2017 / 11:49 H.

Esta semana se cumple el X aniversario de la Ley de Igualdad, una de las leyes con más apoyo social y que probablemente mayor impacto ha provocado en nuestra sociedad en la consecución de la igualdad real entre mujeres y hombres. Es verdad que su aplicación ha coincidido con el periodo de plena crisis económica y aunque la inversión efectuada y el compromiso político en los últimos años no ha sido el necesario, hay ya conquistas incuestionables como la paridad en los puestos de responsabilidad, el derecho al permiso de paternidad o los planes de igualdad en las empresas. Si algo ha caracterizado al PSOE a lo largo de su historia es su apuesta por la igualdad de las mujeres. Fue una socialista, Clara Zetkin, la que organizó la Primera Internacional de Mujeres en el año 1907 y declaró la conmemoración del 8 de marzo, como Día Internacional de la Mujer en 1910. Fue el PSOE el primero en incorporar a mujeres diputadas al Congreso en la II República, fue el PSOE el que fomentó la participación de las mujeres en la política, introduciendo la cuota del 25% en 1988, pasando al 33% en 1994 e introduciendo el principio de democracia paritaria en el 34 Congreso celebrado en 1997. También ha sido el PSOE el que primero eligió a una mujer presidenta de una Comunidad Autónoma, María Antonia Martínez, Presidenta de Murcia, y el que una apuesta más decidida ha hecho siempre por las políticas públicas de igualdad. Por estas y otras muchas razones, el partido socialista ha sido el que ha contado históricamente con un mayor apoyo electoral de las mujeres, hasta 13 puntos de diferencia ha llegado a producirse entre el voto femenino y masculino al PSOE. Ahora toca hacer realidad esa apuesta por un partido feminista, que de nuevo está a punto de hacer historia si el la militancia elige a la que sería su primera secretaria general mujer, Susana Díaz. La actual presidenta de Andalucía podría hacer historia siendo la primera Secretaria General del PSOE, y si es elegida candidata socialista a la Presidencia del Gobierno y el PSOE ganara las elecciones, la primera mujer Presidenta del Gobierno de España. Hacer historia y ser pioneros al PSOE siempre le ha ido bien. Por coherencia con esa historia y con el feminismo del que me siento parte apoyaré a Susana Díaz, como secretaria general del PSOE, como en su día aposté por otras mujeres. Creo además que el PSOE necesita en este momento frescura y un liderazgo sólido, creíble, capaz de conciliar el mejor legado del partido socialista con el futuro que representan la generación X, la generación Milenium y la nueva generación Z que está por llegar. Susana Díaz representa todo eso y su solvencia está avalada por su intachable gestión en la Junta de Andalucía y sus profundas convicciones a la hora de tomar decisiones, aunque sean difíciles. Las mujeres están aportando autenticidad a la política en momentos de crisis como el actual, y Susana Díaz puede ser la solución a un partido que requiere de nuevas formas, nuevos procesos y nuevas estrategias para conectar con la sociedad y ofrecer respuestas a las gran cantidad de preguntas sin respuestas que la democracia y la socialdemocracia tiene planteadas en estos momentos. El liderazgo no sólo se construye, se nace o no se nace con él y esta mujer ha demostrado que es una líder indiscutible con dotes de mando y rigor a la hora de ofrecer soluciones. Creo que ha llegado la hora de la verdad y conseguir que esa apuesta por la igualdad nos la creamos. Antes lo intentaron otras como Matilde Fernández o Carmen Chacón, espero que esta sea la definitiva. En los últimos años pudimos ver en el PSOE a una secretaria de organización mujer, una dirección paritaria, una vicepresidenta del Gobierno, un gobierno paritario, una ministra de Defensa y hasta varias presidentas autonómicas. Ese logro conseguidos por el esfuerzo y la batalla de tantas mujeres socialistas, había desparecido de un plumazo en los últimos años tras los anteriores Congresos, esperemos que este próximo congreso de junio nos devuelva a la senda que nunca debimos abandonar, con un liderazgo tan necesario como el de Susana Díez. Las mujeres tienen derecho a ocupar el espacio que les corresponde en el ejercicio del poder y ejercer el poder real y no delegado. El machismo no ha desaparecido sin embargo de ninguna estructura social, por tanto armemonos para combatirlo, porque en esta campaña de primarias, lo veremos aflorar por desgracia en algún momento.