Parlamentarismo y democracia

La suma de votos es democracia y hay que asumirlo >> Rajoy no ha querido dimitir para parar la moción de censura y sale de La Moncloa con aires de dignidad>> No es lo mismo afrontar unas próximas elecciones con Poder que sin el Poder en la mano

03 jun 2018 / 10:37 H.

Síntoma de salud democrática, por primera vez prospera en 40 años una moción de censura en España. Los votantes del PP estarán muy contrariados en estos momentos, pero seguramente que pasado el sarpullido inesperado del viernes volverán a abrumarse por la sentencia de la Gürtel y otras cuestiones (también se desgañitarán con los EREs en Andalucía). Ahora bien, lo que viene, en lo que estamos, es un galimatías absoluto, fruto del todos contra Mariano Rajoy antes que la mayoría a favor de Pedro Sánchez. Al PSOE, con 84 diputados, no le va a ser fácil gobernar, exactamente todo lo contrario, se encamina a ser solo un Gobierno de escaparate o al frentismo absoluto. Podemos, tras su grave error de 2016, no apoyando a Sánchez, cuando el Rey le encomendó el desbloqueo de la investidura, quiere tocar poder y no lo dejan (“Sí se puede” coreaban sus diputados en el Congreso tras el triunfo de la moción de censura).

¿Y Ciudadanos? Quien no había encuesta que no le aumentara una espectacular subida en intención de voto, quien se veía ganador de unas elecciones anticipadas por las que lleva tiempo luchando, ha sufrido el mayor varapalo político conocido. Estaba en todas las quinielas para La Moncloa, apostaba a ganador en todas las partidas, y ahora, tras jugar mal la baza de la sentencia de la corrupción gubernamental, se queda sin horizonte político inmediato. El PP, descabezado su líder, afronta un serio problema de relevo generacional sin el poder en la mano, algo impensable hace solo una semana. Ciudadanos no dejó otra salida al PNV que votar sí a la moción de censura. Si Podemos presentaba una segunda moción instrumental encaminada a elecciones anticipadas y Ciudadanos arropó esa intención, los nacionalistas vascos, que solo miran su ombligo, no iban a permitir que un cambio de Gobierno llevase a Rivera a La Moncloa, sabiendo que quiere cargarse el cupo vasco. Error estratégico de Ciudadanos, que tanto daño ha hecho al PP, para quien el consuelo de la mayoría absoluta en el Senado no es más que una importantísima y subrayable pica en Flandes, pero, a la vez, la garantía de su desmembramiento por seguir haciendo vieja política.