Mirar al futuro

Según una célebre frase del actor y humorista Groucho Marx, “La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados”. Tal vez sea exagerado ese irónico diagnóstico, pero algo de verdad esconde, sobre todo si nos fijamos en algunos de los caminos equivocados que eligen nuestros líderes para arañar algunos votos que los aúpen a un ansiado sillón. Lo hemos visto en la utilización que hacen de corrientes dialécticas como el feminismo, la eutanasia, el franquismo, el animalismo... Todo esto mientras se soslayan los graves problemas de educación y de convivencia, que afloran alimentados por un falso enfrentamiento entre izquierdas y derechas o entre monárquicos y republicanos. Nada nuevo bajo el sol. Del independentismo catalán, mejor no hablar. Bochornoso espectáculo retransmitido a diario. Sin haber conocido aún el resultado de estas elecciones, permítanme que abogue por una nueva España de y para las nuevas generaciones, donde vivir en paz no sea una utopía. Donde a nadie le falte pan y hogar. Frente a una España “vaciada” de libertades, de derechos, de igualdad de oportunidades, necesitamos más que nunca una España unida, rural, trabajadora, generosa, respetuosa con su pasado e ilusionada con su futuro.