Dignidad

Queridos Reyes Magos: Os escribo para que en el ya presente año 2021 traigáis a los hombres dignidad. Pero no me confundáis el término por favor. No me refiero a esa “dignidad” que en mi opinión se mal usa porque en realidad nos estamos refiriendo al “orgullo”. La dignidad de la que os hablo, la que os pido, es aquella que se define —ya sea en un hombre o en una mujer— por ser honesto, por ser honrado, por no mentir, por no tener doble intención que es una forma de engañar, por honrar a nuestros padres. Un hombre digno no roba, no codicia los bienes ajenos, ni es desordenado en las cuestiones carnales; el hombre digno es humilde de corazón, es manso en su relación con todos, busca siempre la justicia para tomar solo lo que le corresponde, y quiere la justicia para los demás, es de pensamiento pacífico instando siempre la amistad entre las personas, misericordioso con todos, afable con todos, caritativo con todos, bueno y generoso con todos, paciente en todo, y, sobre todo, quiere para los demás lo que quiere para sí mismo y la verdad es siempre su bandera. Por eso os pido que nos traigáis dignidad, porque la dignidad trae justicia y la justicia paz y verdadera prosperidad. Creo yo.