Medios o voluntad

17 mar 2019 / 11:22 H.

E l final del siglo XIX se caracterizó por el asociacionismo rural, en el marco de una economía social, propia de un mercado global y volátil. La existencia de las cooperativas de aceite ha permitido solventar la subordinación en los mercados, debido a la agrupación de la oferta y la gestión de las ventas. El cooperativismo ofrece un contexto comercial adecuado, donde los intereses de los asociados son defendidos con independencia del volumen de su aportación, estando regidos por una estructura democrática. La gestión de los siniestros es un problema fundamental, que se plasmó en Plan Anual de Seguros Agrarios. Éste permite no endeudar la explotación y mantener su viabilidad -sin depender de las ayudas administrativas- en situaciones de siniestro meteorológico. El año pasado, con la fusión de las cooperativas de San Juan y Virgen de la Capilla, nuestra provincia demostró que este mecanismo ofrece la oportunidad de mantener la identidad de los agricultores que las integran, trabajando individualmente y pensando de forma global. Teniendo los medios, preguntémonos por qué las cosechas llegan cada año, pero las soluciones nunca maduran.