Maravillosos años

16 ene 2017 / 12:40 H.

En la foto fija de este momento se puede ver cómo quedaron atrás aquellos maravillosos años de romerías y ferias que servían de escenario para compartir juntos momentos inolvidables. Qué bonita la juventud y la amistad. La vida de color de rosa, alejada de congresos y citas de postín en las que fluye la conflictividad política por cuestiones de intereses municipalistas y capitalinos. José Enrique Fernández de Moya Romero (Jaén, 1969) y Miguel Moreno Lorente (Porcuna, 1964) podrán rememorar con esta fotografía del año 2007 tiempos de vino y rosas. Diez años después, la vuelta a la tortilla revela otro tipo de compañerismo, con altavoces por los rincones de una provincia tan grande como incontrolable. Solo por el momento.

Al grano. Se acerca la celebración del XVIII Congreso Nacional del Partido Popular en el que los 3.128 compromisarios elegirán a Mariano Rajoy, despojado de rival, presidente. En él se despejarán dudas acerca del posicionamiento de la dirección andaluza, liderada por Juan Manuel Moreno Bonilla. Hay muchas expectativas en la provincia al respecto. Sobradamente conocida es la excelente relación que existe entre él y el presidente jiennense de puertas para afuera y los roces y las discrepancias que se barren dentro de casa. Después del nacional toca el provincial. Y, aunque todavía no está convocado, ahí está el “quid” de la cuestión. Todo parece indicar que José Enrique Fernández de Moya optará a la reelección. No lo dice claramente, porque ya se sabe que todo tiene su momento. Sin embargo, entre líneas se lee que, si todos están con él y sus superiores quieren que continué, fiel a su disciplina de partido, seguirá al pie del cañón. Lo que ocurre es que, a tenor de lo publicado por este periódico, no todos están con él. El alcalde de Porcuna y también diputado jiennense fue el primero en levantar la mano para anunciar su posible candidatura a la presidencia provincial del PP, aunque lo más probable es que, finalmente, quede en agua de borrajas. Recibió el apoyo público del regidor de Aldeaquemada. Dos pesos pesados del municipalismo que hicieron saltar las alarmas en la calle San Clemente, por lo que pueda pasar. El liderazgo del también secretario de Estado de Hacienda quedó claro en apenas minutos. Una tromba de alcaldes se unieron para organizar algo parecido a una plataforma que suma ya, según ellos, 81 presidentes locales. Consideran que solo él, que sabe lo que es “navegar” con dificultades, está preparado para continuar al frente del “barco”. La oficialidad no quiere ni escuchar la palabra fisura. Tampoco los críticos. En realidad, todos hablan de lo mismo, de democratización de una organización política fuerte y apoyo a los pueblos. La diferencia está en la palabra “renovación”. Ahí es verdad que unos apuestan por ella y otros no. Miguel Moreno continúa en su lucha particular, que entiende que es compatible con la defensa de los intereses del municipio al que representa. Es decir, que puede llegar a ser presidente provincial del PP y continuar como alcalde de Porcuna. Habla de compañeros que están con él, cifra en 54 los municipios que lo apoyan y, aunque es consciente del “embolao”, sigue firme en su propósito.