Lucifer

Es el diablo, padre de la mentira, quien promueve las cosas mentirosas. Con los avances tecnológicos también se cuelan cosas malas. Decía el padre Malagrida, provincial de la Compañía de Jesús en Portugal en el siglo XVIII, que todo está en el espíritu. Nos decía así que la vida entera es lucha entre bien y mal, y que el escenario de la batalla no es un terreno, sino el alma de cada uno. Pero para esa batalla es necesario reconocer a los reyes de ambos bandos; en el ejército del bien, María de Nazaret, y en el ejército del mal, el jefe de los demonios. Reconocido entonces el escenario bélico, siempre digo que las cosas que ocurren, para saber de qué lado vienen, hemos de preguntarnos si tal cosa la haría la Virgen María, o, en otras palabras, si la haría la mejor de las madres. Pues centrándonos en la inteligencia artificial, y siendo cierto que tiene grandes utilidades, también es cierto que nos ha traído ya grandes monstruosidades. Gravísimo ejemplo: ver al humorista Eugenio hablando inglés con su misma voz, siendo mentira. La base de la justicia es la verdad, y si ahora cualquiera que tenga nuestra imagen puede ponernos reconociendo un delito, entonces todos estamos en peligro.