Los discípulos de Ramón Palacios
Todo puede pasar, pero la previsible victoria del ungido Requena solidifica la línea sucesoria que trazó el exalcalde de La Carolina Ramón Palacios >> El PP de Jaén saldrá claramente dividido, sea cual sea el resultado >> Lo del PSOE pinta regular
Hay quien se pregunta qué piensa en estos momentos Ramón Palacios sobre la brutal división de los populares, cuyo congreso provincial de hoy en Jaén capital supone algo más que una lógica y previsible lucha de poder. Asistimos a una pelea gorda y radiada, elevada en tono pero con menos carnaza y malaúva que la que hace años tuvieron los populares en el Ayuntamiento, concejales disparando pestes contra concejales de la misma bancada y hasta agresiones. Ahora, semejante suicidio político ha saltado a la provincia, con 21 alcaldes contra la continuidad y la ‘sangre azul’ que como pionero de AP ungía el exalcalde carolinense. Los socialistas podrían estar frotándose las manos que la Diputación es su fortaleza, pero tras las primarias del PSOE (ocho meses de pelea agónica, inaudita la sangría) nada volverá a ser igual, también en Jaén. Jaén es susanista, como marca la calle Hurtado, pero esos mil y pico avales que arrancó Pedro Sánchez de la militancia socialista jaenera no eran ni mucho menos previsibles, todo lo contrario, que la movilización del aparato hacía presagiar incluso el bochorno en plan votación a la búlgara, pero no. Hoy es el día marcado como el del principio del fin o el día del nuevo PSOE; tocado sale, lo que hay que ver es si solamente tocado o muy tocado en el ámbito nacional; Jaén es otra cosa, está claro. Volviendo a los populares, que no serán partido triunfante hasta que no se hagan con las riendas de la Plaza de San Francisco, en estas semanas han demostrado que no quieren esa alternancia, cada ves más cercana y ahora cada vez más lejana. Con todo, gane Requena, que el alcalde de Santisteban del Puerto cuenta con compromisarios para ganar por goleada a Moreno o gane el alcalde de Porcuna, a quien las bases le han respondido de forma perfectamente visualizable (56% frente a un 44%), una cuestión sí que es cierta, Sevilla sale mal parada porque no logró candidatura única antes de las votaciones ni la unión de las dos candidaturas tras el rifirrafe. Y es que los discípulos de Ramón Palacios siguen teniendo el tarro de las esencias ‘peperas’ en Jaén.