Los caldosos

24 may 2017 / 11:40 H.

Como de primarias y dirigentes políticos nacionales y provinciales estarán algo aburridos a estas alturas de semana, acude salerosa nuestra columna a mayor gloria de los eventos que en diferentes sedes, primordialmente rurales, se celebran con ocasión de nada más y nada menos que el gran motivo: “juntarse”. Así que se aprovecha la romería, la onomástica o el ascenso laboral, para quedar y preparar viandas y litros (¡ay si fueran del Alcázar!). Preciada costumbre esta que contrapesos maritales no debieran impedir, sino compartir. Se buscan lares por doquier, la huerta propia o de los suegros, la cochera, la casa-campo, el cortijillo...., lo importante es quedar, pasando a segundo plano la pinta que se lleve o el vidriao. Luego allí solo se oyen risas, buen humor, confidencias, amistades que se entrelazan, una caja flamenca que se aporrea, y ¡cómo no! el que baila de salón; “primo que si abre otro, que qué rico te ha salido, que para cuándo la próxima”. Se podrían asomar a redes sociales a cuchichear, pero si huelen y saborean el caldoso, ¡escalera de color!