Lemas

03 sep 2018 / 11:48 H.

Lo peor que puede ocurrir en democracia es dejarse llevar por derivas sectarias y totalitarias, sean de izquierdas o de derechas. Nos estamos refiriendo a aquellos gobernantes que se ocupan a diario de dividir y enfrentar a ciudadanos en función de sus propios intereses partidistas. Un ejemplo explícito lo tenemos en Cataluña donde muchos políticos viven, y muy bien por cierto, de repetir lemas y consignas. La fractura social que están ocasionando es imperdonable. Algo parecido está ocurriendo con la Ley de Memoria Histórica, concebida más para dividir que para restañar heridas del pasado. Lo dijeron en su día históricos socialistas. El interés por revivir una guerra que sus propios protagonistas pidieron que se olvidara para siempre, resulta muy paradójico. Y es que aquella contienda de heroico tuvo muy poco. Basta con leer un poco para darse cuenta de que fue una minoría la que “obligó”, con sus alistamientos forzosos, a unos enfrentamientos entre hermanos, que nadie debió soportar y padecer. ¡Qué triste! Hoy están llenas las tertulias de lemas y de consignas partidistas. Es urgente que se conozcan todas las verdades históricas y no se juegue a la propaganda fácil e interesada. El respeto y la tolerancia son la base de la convivencia en paz que necesitamos todos.