aceite y desempleo

28 may 2017 / 11:31 H.

Pasados los días crispados, Congreso del PP y primarias del PSOE, haríamos bien todos, más los responsables políticos, en aterrizar de nuevo en la realidad. Y nuestro entorno es mucho más convulso que los procesos partidarios. Hay en Jaén 19.734 personas que llevan más de un año desempleadas, casi una 37% del total de parados. En el edén del aceite de oliva corre oro líquido de las almazaras a los bancos y vergüenza ácida en el empleo. Los ciudadanos comienzan a estar hartos de quienes nos gobiernan. Hastiados de promesas, su verdadero problema es simple, el trabajo. Ni es de recibo, ni deberíamos admitirlo, que no se marque el empleo como prioridad. En un país donde se utiliza la Constitución como arma arrojadiza, día sí y día no, nadie quiere ni leerla ni desarrollarla. Pues en esa Ley de leyes pone que el trabajo es un derecho. Yo voy a añadir algo a este derecho constitucional y es que cuando en casa hay para comer, uno se siente más libre. Quizá a los políticos les atemorice la libertad del Pueblo y por eso utilizan el desempleo como arma de control.