Hermanos

24 sep 2017 / 10:18 H.

Mi queridísimo don Antonio: Hoy quisiéramos hablarle, la hija de Francisca y yo, de nuestra familia catalana. Desde nuestro punto de vista, no podemos dejar de decir, en primer lugar, que los catalanes son nuestros hermanos, porque somos españoles, porque compartimos la misma historia, porque hablamos el mismo idioma, porque vivimos en el mismo territorio, porque nos une la sangre de los mismos antepasados, porque somos hijos de un mismo Dios. Pero luego están esos pocos manipuladores, equivocados, que creen que dividiendo vencerán, cuando la realidad segura es que perderán, pues perderían la historia y quedarían huérfanos de pasado. Desgraciadamente, don Antonio, a nuestro parecer al menos, la sociedad actual favorece que la gente actúe como una masa, el hombre-masa, que diría Ortega y Gasset. Y esto trae un prototipo de hombre desinformado y apático, que cae más fácilmente en la manipulación, lo que se mezcla con las distorsiones propias de cualquier sociedad, que ayudan a crear ese ambiente general de error. Es nuestra humilde opinión. Esperemos, don Antonio, que podamos volver a unir las piezas del puzzle que tristemente llevan separadas tanto tiempo. Que siga usted bien.