Hay que pararlo ya

27 sep 2018 / 08:31 H.

Otro asesinato de mujer. En Úbeda. Y la cuenta general sigue, sin parón ni retroceso. Violencia de género la llaman. Violencia degenerada. Las medidas preventivas apenas surten efecto, que el asesino cuando está decidido a matar, mata. El asesino espera su momento y escoge su víctima, la sabe frágil e indefensa y repite. Denuncias, mandatos de alejamiento, pulseras (cuando las hay) apenas si frenan los ataques, las muertes. Este último de Úbeda ha sido de libro. Aún así no se ha podido evitar, ¿por qué? Sin duda existen muchas causas que no se han podido evaluar a tiempo ni siquiera prevenir. Mas creo imprescindible un trabajo previo ante estos casos, preventivo, cuando ya se dan síntomas, muestras y evidencias del problema; creo que se debe trabajar con la mujer, víctima ya de malos tratos, en el ámbito psicológico. Hay que convencerla para que no retroceda, que no trate de revertir la situación, perdonando, que no (si ha logrado zafarse de uno) se meta en otro peor. Rara vez funciona. De ahí insistirles en la necesidad de alejarse de tipos así. Esto hay que pararlo como sea.