Frente al abismo

Parece que tenemos indiferencia sobre la situación financiera de nuestro Ayuntamiento, pero deberíamos empezar a preocuparnos. Pasan los años y cada vez hay menos recursos para realizar las tareas básicas de una ciudad, algunas se atienden aplicando tan pocos recursos que da la sensación que no se realizan. Lo peor es que no se ingresa lo suficiente ni para lo que se hace y hay que endeudarse para tapar el déficit producido. Creo que no hay que ser muy entendido en economía o finanzas para ver que vamos a pasos agigantados hacia un colapso del Ayuntamiento. Llegara el día que no haya nada que anticipar de los pagos de la Junta y del Estado, que las entidades financieras no solo no te presten más sino que ejecuten las garantías y por tanto no haya ni para pagar a ningún proveedor básico y se pague una nómina cada dos o tres meses. Si no se pone remedio ese día llegará. No sé si será en este año. Todos los partidos deben ponerse de acuerdo legislar en el parlamento nacional medidas para rescatar a ayuntamientos como el nuestro, olvidar la ayuda individual, evitando de esta forma el sentimiento de discriminación del que lo ha hecho bien. El Ayuntamiento debe hacer algo más aunque sea doloroso. No solo es político también debe ser gestor.