El poder

05 nov 2018 / 11:42 H.

Hay un término abstracto difícil de definir pero que todos conocemos de sobra. Amigo de los lujos y del dinero, es causa de enfrentamientos directos e indirectos. Tenemos miedo a sus usos, a veces convertidos en abusos. Y es que hay mucha gente que no sabe administrarlo y que está dispuesta a todo por conseguirlo. Por su culpa aparecen rencillas, odios, conflictos e incluso guerras. Nos referimos, obviamente, al poder. Cada cual necesitamos de él nuestra pequeña dosis para sobrevivir. ¿Qué sería de nosotros sin poder adquisitivo o sin poder elegir libremente a nuestros representantes en unas elecciones? Porque detrás de las elecciones, ¿qué hay que no sean ansias de poder? Las luchas por el poder siempre han existido. En todo tipo de regímenes políticos. Y usando todo tipo de artimañas, incluso las más innobles o miserables: acosos, amenazas, delaciones, denuncias, manipulaciones, muertes... Como muy bien ha leído recientemente la infanta Leonor, tenemos una monarquía parlamentaria que regula el uso “democrático” del poder. Y en ella confiamos. En ella y en los gobernantes responsables que ponen el bien común y la convivencia en paz por encima de cualquier sigla o ideología. ¡No queremos más guerras ni enfrentamientos civiles entre ciudadanos españoles!